Cubierta de oro, así de ostentosa podríamos imaginarnos la grapadora de sobremesa que luce en las mesas de los despacho más importantes y exclusivos del mundo, y así es la exclusiva grapadora creada por la empresa española Casco que os presentamos. Y es que las grapadoras también tienen clases…
En concreto, está chapada en oro de 23 quilates y cuproníquel, sus tripas son de acero y está pulida a mano, lo que le da un brillo y una apariencia únicas, pero no solo se trata de lucir, ya que este artículo de oficina está pensando para perdurar en el tiempo. Su coste: 190 euros.
Esta lujosa grapadora -hasta hoy jamás pensé en aunar en un texto lujo y grapadora- tiene una hermana pequeña, también de sobremesa, pero de menor tamaño cuyo precio de venta al público son 165 euros.
La familia se completa con una hermanastra, una grapadora de tenaza -suena hasta peligrosa, mejor la llamaré de mano- que cuesta 215 euros.
La empresa española El Casco está especializada en fabricar artículos de escritorio de lujo para oficinas o despacho, empleando diseños exclusivos y apostando por la tradición, el diseño, la artesanía, el estilo y la funcionalidad.
“La fiabilidad mecánica y la calidad en los acabados de los productos es nuestra prioridad. Cada pieza es ensamblada a mano y el metal es pulido también de forma manual hasta en seis ocasiones, lo que permite increíbles terminaciones”, afirman los responsables de El Casco.
Si busca un regalo especial, tal vez puedas decantarte por una de estas grapadoras, presentadas en elegantes estuches negros. Aunque te dejamos una duda: ¿regalar una grapadora así de exclusiva sin grapas? o regalarla con una simple, triste y vulgar cajita de grapas galvanizadas… Es todo un dilema.