La Universidad de Salamanca fue fundada por Alfonso IX en 1218 y es la más antigua de las universidades hispanas existentes. Su fachada, conocida como “Fachada Rica”, que data de 1529, se construyó tres siglos después de nacer la institución académica y es, quizás, uno de los mejores ejemplos de arte plateresco español, una variante arquitectónica y estilística del gótico tardío que se desarrolla en los primeros años del Siglo XVI. La FNMT-Real Casa de la Moneda se ha unido a la celebración de los 800 años de la universidad salmantina aportando una moneda acuñada en plata, con valor nominal de 10 euros.
El Boletín Oficial del Estado número 120, del jueves 17 de mayo de 2018, Sección I, Página 51030, publicaba la Orden Ministerial EIC/496/2018, de 9 de mayo, por la que se acuerda la emisión, acuñación y puesta en circulación de monedas de colección dedicadas a los “800 Años de la Universidad de Salamanca”.
Acuñada por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda, la pieza conmemorativa aparecerá durante el segundo trimestre del presente año, con valor nominal de 10 euros, con métrica antigua de 8 reales, en plata de 925 milésimas. Peso de 27 gramos, diámetro de 40 milímetros, canto estriado, calidad Proof y tirada máxima de 6.000 ejemplares.
En el anverso de la moneda se reproduce el retrato a izquierda del Rey Don Felipe VI. En la parte superior, en sentido circular y en mayúsculas, aparece la leyenda “Felipe VI Rey de España”. En la parte inferior, entre dos puntos, el año de acuñación “2018”. Rodea los motivos y leyendas una gráfila de perlas.
Por su parte, el reverso muestra una imagen de la fachada plateresca, conocida como “Fachada Rica” de las Escuelas Mayores de la Universidad de Salamanca. A la izquierda, en dos líneas y en mayúsculas, el valor nominal de la pieza “10 euro”; a la derecha, en dos líneas, los años “1218” y “2018” referencia a los 800 años de existencia de la Universidad; más abajo, la marca de la Ceca de Madrid, la “M” coronada. En la parte superior de la moneda, en dos líneas y en mayúsculas, la leyenda “Universidad de Salamanca”, con la tipografía corporativa de este centro universitario que data del siglo XV, conocida como “Universitas Studii Salamantini” y se utilizaba junto al Víctor para homenajear a los estudiantes que se licenciaban o doctoraban.
La Fachada de la Universidad de Salamanca data de 1529
La majestuosa fachada reproducida en el reverso de la moneda descubre el arte plateresco en todo su máximo esplendor, que se desarrolla durante los primeros 30 años del Siglo XVI.
La minuciosa decoración, la continuidad de las estructuras góticas, la abundante decoración de escudos, junto a los sillares y frontones, se repiten continuamente en los tres pisos que ocupa el frontal de la conocida como “Fachada Rica” de las Escuelas Mayores de la Universidad de Salamanca.
La Crestería (Conjunto de motivos ornamentales y adornos, principalmente del tipo vegetal o geométrico, repetidos en serie, habitualmente de estructura calada, que coronan la parte alta de un edificio) está decorada tipo telón, que indica la existencia de otra parte más antigua, con remate de decoración calada imitando una cresta, la decoración ricamente dispuesta “a candelieri” u ornamentos que imitan candelabros.
Los Reyes Católicos, en esta época de esplendor, ordenaron su construcción. De ahí que en el rosetón central aparezcan las imágenes enfrentadas de la reina Isabel de Castilla y el rey Fernando de Aragón, con la leyenda “La Universidad a los Reyes y los Reyes a la Universidad”, escrita en griego, que deja patente la gratitud de la Universidad a sus Reyes. En el centro se puede contemplar la efigie de Carlos I, ya que durante su reinado finalizó tan magnífica obra.
En el año 1254 fue reconocida por el Papa Alejandro IV como una de las cuatro mayores universidades del mundo, junto con las universidades de Oxford, París y Bolonia.
La famosa y moldeable piedra de Villamayor, cantera inagotable al oeste de la ciudad, fue la utilizada en su construcción.
Sus tres cuerpos sobrepuestos y separados por frisos, están perfectamente definidos, con el doble arco carpanel en la entrada.
La majestuosa fachada se inició en el año 1529, costando la cifra de 30.000 ducados.