El debate sobre el polémico aumento de los royalties cobrados por el Gobierno de Australia Occidental a las compañías mineras que operan en su territorio parece haber concluido, después de que el Partido Laborista haya anunciado su intención de congelarlos si resulta reelegido en los comicios del próximo mes de marzo.
La polémica subida de los royalties a las mineras de oro lleva debatiéndose en Australia Occidental desde hace cuatro años, después de que el Partido Laborista se viera obligado a desistir de su intención de subirlos tras perder la votación en el Parlamento, en diciembre de 2017.
Ahora, a escasas semanas de las elecciones, los laboristas quieren asegurarse su reelección comprometiéndose a desechar aquella propuesta y, de paso, contentar al poderoso sector minero del oro, que contribuye a una importante parte del PIB de la región.
Como señalan desde Mining Weekly, la Asociación de Compañías de Minería y Exploración (AMEC, por sus siglas en inglés), ha acogido favorablemente el compromiso por parte del Partido Laborista de no proponer un incremento de los royalties sobre el oro si resultan reelegidos en los comicios de marzo, y mantenerlos en el actual 2,5%.
En palabras del CEO de AMEC, Warren Pearce, “este compromiso supone un alivio para la comunidad y la industria, que estaban preocupadas ante la posibilidad de que el Parlamento pudiera aprobar un incremento de los royalties sobre el oro. Con este compromiso de no tocar los royalties por parte de los tres principales partidos, el Laborista, el Liberal y el Nacional, se asegura que permanecerán inalterados cualquiera que sea el resultado electoral”.
Desde la patronal de las compañías mineras valoran que esta decisión de los principales partidos políticos va a dotar al sector de la seguridad jurídica que precisa para atraer a nuevos inversores internacionales, que van a propiciar el incremento de la actividad y la apertura de nuevas minas.
Según los datos de la industria, el número de proyectos de oro se ha incrementado desde los 47 entre 2018 y 2019 a 52 en 2019/2020, lo que aumentará su aportación a la economía de Australia Occidental.
La subida del precio del oro en los últimos años también ha contribuido a esta prosperidad y, de paso, ha reducido la necesidad de aumentar los ingresos vía royalties. Según Pearce, en los últimos dos años se han abierto cinco nuevas minas.
Los ingresos en concepto de royalties por el oro extraído en Australia Occidental se elevaron a 388 millones de dólares australianos (308 millones de dólares USA) en el periodo 2019/2020, y se espera que se incrementen después del precio récord alcanzado por el oro durante el pasado verano.
Los datos del Departamento de Minas, Regulación Industrial y Seguridad estiman en 679 millones de dólares australianos (540 millones de dólares USA) la inversión en proyectos de oro en desarrollo, y otros 1.700 millones (1.350 millones) en futuros proyectos.
El objetivo es incrementar el número de minas en desarrollo en Australia Occidental en cinco o seis durante los próximos 18 meses. “La seguridad jurídica sobre los royalties del oro supone una acertada decisión de liderazgo económico que va a contribuir al crecimiento de la industria y a crear más empleo y oportunidades para los ciudadanos de Australia Occidental”, concluye Pearce.