Después de un año 2021 bastante discreto, el oro podría despuntar en 2022 gracias a la combinación entre unos tipos de interés reales negativos, la actuación del dólar y la demanda de activos refugio.
Éstas son las principales razones que esgrimen desde BlackRock, la mayor empresa de gestión de inversiones del mundo, para apostar por el oro de cara al nuevo año.
Los analistas de BlackRock, empresa que gestiona más de 5.100 millones de dólares en inversiones, recuerdan que el precio del oro ha caído un 6% en lo que llevamos de 2021. El metal precioso se dirige así a su primer descenso anual de los últimos tres años, en un entorno marcado por la reducción de los estímulos adoptados por los bancos centrales y por la mayor efectividad de las vacunas para combatir el covid-19, lo que ha reducido la percepción de riesgo por los inversores.
En palabras de Evy Hambro, responsable global de inversiones temáticas y sectoriales del gigante de inversiones estadounidense, en una entrevista con Bloomberg, “parece que en estos momentos el oro ha perdido el favor de los inversores, aunque la actual percepción negativa de éstos hacia el metal constituye más un riesgo al alza que a la baja de cara al próximo año”.
Durante 2021, los ETF de oro han estado registrando un importante flujo de salida de capitales. SPDR Gold Shares, el mayor ETF de oro del mundo, ha registrado una salida neta de alrededor de 10.000 millones de dólares en lo que llevamos de año, la mayor desde 2013 y equivalente a unas 193 toneladas de metal.
“Históricamente, los momentos en que el sentimiento hacia el oro y los productos relacionados con éste se vuelven muy negativos, suelen presentar interesantes oportunidades de compra”, advierte Hambro.
Los expertos creen que la caída del precio del metal durante este año puede preparar el camino para un renovado interés por los ETF durante 2022 por parte de los inversores que buscan una protección frente al aumento de la incertidumbre global.
El papel tradicional del oro como una protección frente a la subida de los precios puede convertirse en un factor cada vez más importante, conforme aumenta el nivel de inflación, avivada por los niveles de estímulos sin precedentes y a los problemas en la cadena de suministros.
De hecho, el presidente de la Reserva Federal estadounidense, Jerome Powell, señaló tras la última reunión de 2021, que la inflación es el mayor desafío actual para mantener la expansión económica y devolver al mercado laboral a los niveles que tenía antes de la pandemia.
La Fed revisó al alza su previsión de inflación media para 2022, elevándola del 2,2 al 2,6%, decidió acelerar la retirada del programa de compra de activos y confirmó que en 2022 se registrarán al menos tres subidas de los tipos de interés.
Desde BlackRock advierten que las importantes fuerzas inflacionarias llevan a pensar que el nivel de ésta va a continuar en alza durante 2022. Sin embargo, para la gestora de fondos el factor más determinante de cara a la subida del precio del oro en 2022 va a ser el estado de los tipos de interés reales, determinados por el nivel de los tipos y la inflación.
“Creemos que hay muchos motivos para añadir oro a la cartera de inversión como elemento diversificador, dado que los mercados de capitales están en niveles máximos y que todavía hay un riesgo significativo relacionado con la pandemia”, concluye el ejecutivo de BlackRock.