Chris Powell, secretario del Gold Anti-Trust Action Committee Inc GATA, se ha dirigido recientemente a los miembros de esa entidad compartiendo la siguiente reflexión: “Ahora que China parece haber tomado el control del precio del oro, limpiándolo y reprimiéndolo para bajar los precios de las materias primas, aliviando la devaluación de facto del yuan en la guerra comercial de China con Estados Unidos, el sector del oro está más desmoralizado que nunca”.
Los únicos pulsos que quedan en el sector de los metales preciosos, en concreto del oro, parecen pertenecer a ejecutivos de la minería y webs de Internet que promocionan acciones bursátiles y ETFs para una audiencia parece ser que cada vez menor.
Pero si China ahora está usando oro para avanzar la devaluación del yuan y obtener una ventaja comercial contra Estados Unidos, compensando la carga de las tarifas de impuestas por Donald Trump, ha de saber que la aún primera potencia mundial no está indefensa, asegura el secretario de GATA.
Estados Unidos podría llevarse el “arma de oro” de China en cualquier momento que lo desee. Es decir, podría comenzar a comprar metal dorado, subrepticia o abiertamente, devaluar de manera efectiva también al dólar y anular la ventaja comercial que obtiene China al devaluar el yuan.
Después de todo, hace unos días, el presidente Trump criticó a la Reserva Federal por seguir elevando las tasas de interés, fortaleciendo así demasiado el dólar para su gusto. Trump podría usar el oro como arma contra la Fed y contra China.
Por supuesto, el mandatario de la Casa Blanca tiende a contradecirse rápidamente en cualquier cosa importante. “Pero los gobiernos, en casi todas partes, se vuelven más estúpidos cada día y recurren con mayor frecuencia a trucos estúpidos y obvios para la manipulación del mercado”, asegura Powell.
Este axioma puede vencerse más pronto que tarde. El oro, todavía, estará disponible para los “sanos”.