La evolución del precio del oro durante este año 2017, en el que se ha revalorizado un 11% y su actual nivel, hacen que 2018 sea el momento perfecto para empezar a invertir en oro, según aconsejan desde Commonwealth Bank.
El año que viene es el momento perfecto para entrar en el mercado del oro. Es la opinión del analista de commodities de Commonwealth Bank of Australia (CBA), Vivek Dhar. En declaraciones a Kitco News, Dhar señaló que “el oro todavía tiene margen para ceder antes de convertirse en una buena oportunidad de compra. En este momento, estamos en una posición neutral. Pero estaría mucho más cómodo comprando cuando baje a un nivel de 1.250 dólares la onza o menos. Y los 1.300 dólares es un buen nivel para vender”.
En opinión del analista de CBA, el precio del oro promediará los 1.300 dólares la onza en el cuarto trimestre de 2017 y bajará hasta los 1.250 dólares a finales de 2018: “este rango entre 1.250 y 1.300 dólares la onza va a continuar durante el futuro cercano”.
Respecto al reciente nombramiento del nuevo presidente de la Reserva Federal, Jerome H. Powell, Dhar considera que es uno de los factores que van a influir en la evolución del precio del oro. En su opinión, se trata de un centrista que va a mantener la tendencia gradual de la Fed hacia la normalización de los tipos de interés.
Otro factor que va a influir sobre el precio del oro va a ser el resultado de la reforma fiscal de la administración Trump. “Si la reforma sale adelante, será positiva para el dólar, con toda la repatriación de efectivo que va a provocar. Y una evolución positiva del dólar suele ser negativa para el oro”, apunta.
La inestabilidad geopolítica, aunque atemperada en las últimas semanas, puede deparar también sorpresas en cuanto a la evolución del precio del oro. “Hemos visto cómo subió el precio del oro por encima de los 1.300 dólares la onza tras el intercambio de amenazas entre el presidente Trump y Corea del Norte. Éste es el tipo de riesgo que el mercado no puede pronosticar”, señala el analista.
El incremento del riesgo geopolítico suele desencadenar un efecto refugio entre los inversores, que suelen acudir al oro como medio de proteger sus inversiones. Pero este efecto suele durar lo que dura la inestabilidad. “El riesgo de una escalada de tensión con Corea del Norte se ha moderado en las últimas semanas y los mercados se han adaptado a ello. La tendencia natural cuando se produce una situación de este tipo es que el mercado lo descuenta y la escalada de precios se detiene. Esto es lo que ha sucedido con la crisis de Corea del Norte, que al principio ejerció una importante influencia en el precio del oro, pero, una vez que se mantuvo la conversación, el mercado se desentendió”, concluye.