Dubai quiere convertirse en uno de los principales centros mundiales de comercio del oro, compitiendo con Shanghai y Londres.
Como parte del plan diseñado para situar a la mayor ciudad de los Emiratos Árabes Unidos a la cabeza del comercio mundial de oro, actualmente se está construyendo la que será una de las mayores refinerías de oro del mundo, propiedad de Kaloti Precious Metals. Un proyecto en el que se han invertido más de 60 millones de dólares y que se espera que esté terminado en 2018.
Según informa Arabian Business, el objetivo de Dubai es alterar el equilibrio de poder que existe actualmente en el mercado global del oro, y que cuenta con dos centros neurálgicos en el mundo: uno en el oeste (Londres) y otro en el este (Shanghai).
La irrupción de Dubai como un tercer centro de comercio desequilibraría la balanza hacia el este donde, no olvidemos, se encuentran los dos mayores consumidores de oro del mundo: China y la India.
El problema es que, hasta el momento, actividades claves en la industria del oro como el refinado y la intermediación en la compraventa siguen estando dominadas por Europa y los Estados Unidos.
En este sentido, la construcción de una nueva refinería por parte de Kaloti Precious Metals en Dubai forma parte de ese plan para cambiar el equilibrio en la industria, además la puesta en marcha de un nuevo contrato de oro spot por parte de la Dubai Gold and Commodities Exchange el pasado mes de junio.
En palabras del CEO de Kaloti Preiou Metals, Tarek El-Mdaka, a Arabian Business, “Dubai ya es un importante centro global de comercio del oro. La refinería es el siguiente paso, que va a convertir a la ciudad también en un importante centro internacional de refinado e intermediación”.
Dubai cuenta con ventajas para esta apuesta, como son su proximidad a los mayores consumidores mundiales de oro, China e India, su reducida carga fiscal y sus desarrolladas infraestructuras de transporte.
Según datos del Dubai Multi Commodities Centre, el negocio del oro se ha disparado en los últimos años en el emirato: en 2003, Dubai importó y exportó oro por valor de 6.000 millones de dólares; en 2014, el montante se elevó hasta los 75.000 millones; y el año pasado, alrededor del 40% del comercio mundial de oro físico pasó por el emirato.
Sin embargo, en la parte del refinado, la industria del oro de Dubai estaba muy retrasada con respecto a Europa: la capacidad anual de refinado de oro de los Emiratos Árabes Unidos es de 800 toneladas, incluyendo las 450 de la refinería actualmente operada por Kaloti Precious Metals. En cambio, las refinerías suizas procesan más de 3.000 toneladas anuales, que representan alrededor del 50% del refinado global anual.
La nueva refinería construida por Kaloti en Dubai tendrá capacidad para procesar hasta 1.400 toneladas de oro y 600 de plata al año, más del triple que cualquiera de las actuales refinerías existentes en los Emiratos Árabes Unidos.
De momento, Londres sigue desempeñando un papel protagonista en lo que se refiere a la certificación del oro refinado. La London Bullion Market Association (LBMA) controla la lista de refinerías productoras de oro certificado con el sello Good Delivery, lo que supone una desventaja para las refinerías que se encuentran fuera de Europa. Por ello, Kaloti ha solicitado ya su inclusión en la lista de refinerías Good Delivery de la LBMA.