En estas primeras semanas del año 2022 se acumulan los informes y análisis sobre lo que se espera de los metales preciosos para los próximos meses. Según el experto Ross Norman, 2022 va a ser un buen año para el platino, mientras que el oro, la plata y el paladio cuentan con peores perspectivas.
Ross Norman, CEO de Metals Daily y experto en el mercado de los metales preciosos, augura un buen año 2022 para el platino, y no tan bueno para el oro, la plata y el paladio, debido a diversos factores relacionados con el entorno económico, los fundamentos de suministro y demanda, así como otras circunstancias que influyen en el mercado mundial de metales.
Oro
Por lo que respecta al oro, la previsión de Ross Norman es que el metal alcance un precio medio de 1.762 dólares la onza durante el año 2022, con un máximo de 1.850 dólares y un mínimo de 1.675.
Según Norman, “es difícil ser demasiado optimista respecto al oro en 2022, debido al aumento de los factores contrarios al metal en un entorno económico post-pandemia. Aunque los factores favorables (inflación, tipos de interés reales negativos) siguen vigentes, van a ser menos determinantes de lo esperado. Además, el oro ha perdido muchos amigos después de lo que debería haber sido un año estelar”.
El experto considera que 2021 fue un año de consolidación, tras las fuertes ganancias de 2020, mientras que lo que suceda en 2022 dependerá de si los grandes inversores institucionales estadounidenses siguen confiando en el oro. “Parece que el oro está llegando a un punto de inflexión y se enfrenta a una crisis de identidad”, explica Norman.
Cualidades del oro que los inversores daban por sentadas en los últimos años, como su capacidad de convertirse en un depósito de valor, ser una protección frente a la inflación o preservar el patrimonio han sido cuestionadas por algunos inversores, que ahora apuestan por activos diferentes.
Los pequeños inversores en metal físico occidentales apenas son capaces de ocupar el hueco que dejan los inversores asiáticos, muy sensibles al precio, que suelen comprar cuando el precio del oro está bajo y vender en cuanto empieza a subir.
“Quizás lo más preocupante para el oro, en un periodo de grandes innovaciones, es que se le considere pasado de moda como la solución analógica en un mundo cada vez más digitalizado. Si quiere seguir siendo relevante para los inversores, tiene mucho trabajo por delante. Y creo que los mercados se han dado cuenta de ello y por eso su precio está donde está”, advierte Ross Norman.
Plata
En cuanto a la plata, las previsiones de Norman apuntan a un precio medio anual de 20,66 dólares la onza, con un máximo de 26 y un mínimo de 19,50 dólares la onza.
Como reconoce el experto en metales preciosos, la plata tuvo una actuación bastante pobre en 2021, con una caída del 11,72% y existe poco margen para el optimismo de cara a 2022.
“La plata suele ser muy caprichosa y habitualmente supera la revalorización del oro en momentos de subida del mercado, pero suele ser penalizada a la baja cuando el oro cotiza por debajo de lo esperado. Y esto es lo que prevemos para 2022”, señala Norman.
Por el lado positivo, mientras el mundo vuelve a la normalidad tras la pandemia, se espera una recuperación de la industria, especialmente en lo que se refiere a la generación de energía renovable por medio de paneles solares fotovoltaicos.
Por el lado negativo, el experto cree que se van a registrar importantes salidas de capitales de los ETF de plata, lo que introducirá importantes stocks de metal en el mercado, frustrando las expectativas de los inversores.
Platino
Mejores perspectivas tiene Ross Norman para el platino, que, según él, promediará los 1.066 dólares la onza en 2022, con un máximo de 1.275 y un mínimo de 890 dólares la onza.
“Creemos que el precio del platino tiene unas perspectivas muy positivas, ya que la creciente demanda va a absorber el exceso de suministro”, apunta el experto.
El platino atravesó un complicado año 2021, dejándose casi un 10% de su valor, con los problemas en la cadena de suministros y la escasez de semiconductores impactando negativamente en las ventas de automóviles. Una caída que se vio agravada por la salida de capitales de los ETF de platino durante el segundo semestre del año.
De cara al futuro, mientras la economía global se recupera, se espera que la demanda de platino aumente conforme se resuelven los problemas derivados de la escasez de chips. Ese crecimiento se va a registrar tanto en el sector de joyería como en el de automoción o en el industrial y, por extensión, también en el mercado de inversión.
“Por tanto, creemos que el platino va a protagonizar una importante actuación durante 2022, aunque no estelar”, advierte Ross Norman.
Paladio
Por último, el paladio promediará, según las previsiones del CEO de Metals Daily, un precio de 1.959 dólares la onza durante 2022, con un máximo de 2.350 y un mínimo de 1.410 dólares la onza.
Durante 2021, el paladio ha vivido una auténtica montaña rusa, registrando la mayor revalorización de entre los metales preciosos durante el primer semestre del año, alcanzando un nuevo precio máximo histórico (3.016 dólares la onza en mayo de 2021, debido a los problemas de suministro) y desplomándose en el segundo semestre, para perder un 22% de su valor en el año completo.
Esta volatilidad de su precio se ha debido, en gran parte, a la escasez de chips, que ha impactado en la producción global de vehículos. Si los mercados comienzan a normalizar su situación para 2022, deberíamos asistir a una recuperación de la demanda de automóviles, que se elevaría desde los 75 millones de vehículos ligeros en 2021 a 83 millones previstos para 2022 y 92 millones para 2023. Todo ello va a suponer un aumento de la demanda de paladio.
En cambio, la modernización del sector del automóvil, con el incremento de cuota de mercado de los vehículos eléctricos, no va a beneficiar precisamente al paladio.