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El banco central del Líbano contabiliza sus reservas de oro por primera vez en 30 años

Sede del Banco del Líbano (Beirut)

El Banco del Líbano va a proceder al recuento de sus reservas de oro por vez primera en al menos 30 años, ante la presión por parte de la comunidad internacional para que evalúe sus activos antes de decidir si acuden al rescate del país, cuya situación económica es crítica.

El Banco del Líbano va a proceder a contabilizar sus reservas de oro por primera vez en al menos tres décadas, debido a la presión de la comunidad internacional que quiere evaluar su situación económica real antes de incluir al país en los programas de rescate.

Según informa el diario digital The National, que cita fuentes del funcionariado de la entidad, durante los dos últimos años se ha llevado a cabo un 20% de este recuento. Sin embargo, los empleados del banco que están llevando a cabo esta labor, supervisados por un representante del Gobierno, se vieron obligados a detener su trabajo durante varios meses a causa del covid-19-

Su trabajo ha implicado bajar varias veces a la semana a las cámaras acorazadas del banco y pesar uno a uno en una báscula los aproximadamente 13.000 lingotes de oro, de unos 12,4 kilos cada uno (400 onzas troy). Un trabajo agotador desde el punto de vista físico.

A ello hay que añadir la labor que les espera cuando terminen de pesar los lingotes: analizar y pesar las cerca de 700.000 monedas de oro con que cuenta el Banco del Líbano en sus reservas, además de analizar el posible valor histórico de las mismas.

Según los últimos datos publicados por el Consejo Mundial del Oro, el Líbano contaba, a cierre de diciembre de 2021, con 286,8 toneladas de oro, que representaban el 48,8% de sus reservas estratégicas. Una cifra que supera, por ejemplo, a las reservas de oro en poder del Banco de España.

Una vez que se hayan asegurado de contabilizar las toneladas de oro esperadas, será el turno de la firma auditora KPMG, que se encargará de evaluar el valor del metal precioso.

En marzo de 2020, el Gobierno solicitó que se realizara este nuevo inventario después de que la anterior firma auditora con la que trabajaban, Deloitte, fuera incapaz de llevarlo a cabo. El gobernador del banco central libanés, Riad Salameh, aceptó que se realizara esta auditoría, en un momento en que se estaban cuestionando las cuentas de la entidad.

Según el analista financiero Mike Azar, la auditoría es fundamental para comprender las pérdidas económicas que ha sufrido el estado: “si el valor del oro es menor de lo esperado, las pérdidas del Banco del Líbano serán mayores de lo que ha informado el Gobierno”.

El viceprimer ministro libanés, Saadeh Shami, estimó las pérdidas del sector bancario del país en más de 70.000 millones de dólares.

Un informe realizado por Deloitte hace cuatro años y filtrado a la prensa revela que el valor de las reservas de oro del país se acerca a los 18.000 millones de dólares, y que el 60% del oro se custodia en Beirut, mientras que el resto está en las cámaras acorazadas del Banco de la Reserva Federal estadounidense.

El problema no es la existencia del oro, algo que está confirmado por los expertos, sino que es necesario hacer auditorías periódicas para saber cuánto oro hay acumulado, y el Gobierno no lo ha hecho durante muchos años, debido a las dificultades logísticas.

Primer recuento en 30 años

Las fuentes citadas por el diario The National señalan que éste va a ser el primer recuento físico del oro del Banco del Líbano desde la guerra civil (1975-1990). Algunos representantes políticos hablan de una auditoría que presuntamente se celebró en la década de los 90, pero no se ha podido confirmar.

Deloitte fue durante muchos años la firma con la que trabajó el banco central libanés, hasta que el año pasado decidieran finalizar su contrato.

Expertos como el economista Kamal Hamdan creen que no se ha realizado ninguna auditoría del oro desde la guerra civil: “creemos que el gobernador del banco central Elias Sarkis, quien ordenó la compra de la mayor parte del oro en la segunda mitad de la década de los 60, realizó una auditoría. Pero luego tuvo lugar la guerra civil”.

El gobernador Salameh fue nombrado poco después del final de la guerra civil, en 1993. Al parecer, la solicitud de realizar el inventario fue iniciativa del comisionado del Gobierno en el banco central, quien permaneció en el cargo durante casi dos décadas y murió en 2021, por lo que no se sabe si realmente hizo la petición y si ésta fue aceptada.

Dudas sobre la pureza

El principal objetivo de los auditores es verificar si los lingotes de oro cumplen los actuales estándares internacionales de pureza del metal. Algunas fuentes creen que muchos lingotes no cumplirán con la certificación ‘Good Delivery’ otorgada por la London Bullion Market Association (LBMA), debido a que se compraron hace más de 50 años.

En caso de no contar con esta certificación, es complicado que se puedan vender en el mercado internacional en caso de necesidad. Sería necesario enviarlos a una refinería autorizada y volver a fundirlos, conforme a las normas establecidas. Ello supondría reducir el peso total del oro en poder del Banco del Líbano.

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