El Banco Central de Rusia (en la imagen) ha vendido parte de sus reservas de paladio a Nornickel, el fondo creado por la empresa rusa Norilsk Nickel (la mayor productora mundial de níquel y paladio), para ayudarle a satisfacer la demanda de sus inversores en paladio.
La demanda de los clientes de Nornickel ha sido mayor que su producción de paladio, un metal que se utiliza para la fabricación de catalizadores para reducir las emisiones contaminantes de los motores de gasolina.
Según Vladimir Potanin, CEO y copropietario de Nornickel, “el Banco Central nos permite resolver este déficit” para cubrir todas las órdenes de compra, no para acumular stock.
El fondo Nornickel Global Palladium Fund compró cinco toneladas de paladio (unas 160.000 onzas) en 2016, a precios de mercado, en su mayor parte al Banco Central ruso. Está previsto que el fondo adquiera otras cinco toneladas de paladio durante el presente año 2017.
Nornickel creó el fondo en 2016 para desarrollar relaciones con los poseedores de los actuales stocks de este mineral, con un compromiso de transacciones potenciales cercano a los 200 millones de dólares.
El Banco Central ruso, que ocupa el séptimo puesto mundial por volumen de reservas en oro, según los últimos datos del Consejo Mundial del Oro, no ha desvelado el volumen de sus reservas de paladio, que es poco menos que un secreto de Estado.
Según el CEO de Nornickel, la actividad del fondo en el futuro se centrará en suavizar la volatilidad del mercado del paladio e incrementar la demanda por parte de los grandes consumidores industriales de este metal.