Mongolia ha puesto en marcha un plan para incrementar sus reservas nacionales de oro, denominada “Oro nacional para el fondo del Tesoro”, en el marco del programa nacional “Gold-2”. Se trata de una iniciativa dirigida a las compañías mineras, bancos comerciales y particulares, para animarlos a vender su oro al banco central del país.
Según publica el periódico oriental Xinhua, citando fuentes del Banco de Mongolia, esta campaña tendrá una duración de cinco meses y está destinada a convencer tanto a las compañías mineras que operan en Mongolia, como a los bancos comerciales o los propios ciudadanos, para que vendan todo el oro que produzcan o posean al banco central, con el fin de aumentar sus reservas estratégicas de este metal.
La campaña promocionará la compra de oro entre el público y servirá para poner en funcionamiento nuevas normas regulatorias al respecto.
Según los últimos datos facilitados por el supervisor, el Banco de Mongolia adquirió un total de 3,2 toneladas de oro procedentes de empresas y particulares durante los cuatro primeros meses del año, lo que supone un incremento de 257,6 kilos de metal con respecto a la cifra del mismo periodo de 2017.
Por su parte, el Gobierno de Mongolia ha puesto en marcha durante los últimos cinco años una serie de medidas encaminadas a enriquecer los fondos del Tesoro nacional y a mejorar el entorno legal relativo a las reservas en divisas.
A lo largo del año pasado, las compañías mineras de oro vendieron un total de 20,02 toneladas de oro al banco central, contribuyendo en 800 millones de dólares al presupuesto nacional.
La producción anual de oro no había superado la cifra de 20 toneladas desde 2005, cuando alcanzó su máximo histórico, con 25 toneladas.