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El fin del acuerdo sobre el oro y la recogida de beneficios marcan la evolución de las reservas

Caja fuerte con lingotes de oro

El mes de agosto ha traído más movimiento del habitual en la evolución de las reservas de oro por parte de los bancos centrales. Se han sucedido importantes operaciones de compra, pero también se han registrado ventas de elevadas cantidades. En ambas circunstancias han influido la cercanía del fin del llamado Acuerdo de los Bancos Centrales sobre el Oro, así como el elevado precio que ha alcanzado el metal este verano, que ha provocado un efecto de recogida de beneficios por parte de algunos bancos.

Mucho movimiento en agosto dentro del sector oficial. Los bancos centrales han acelerado sus operaciones de compra, pero también se ha registrado una fiebre vendedora por parte de algunas entidades, que puede responder a una necesidad de hacer caja, aprovechando los precios máximos que está registrando el oro a lo largo de este verano.

Lo que no ha cambiado es el volumen de las reservas de los Estados Unidos, que siguen encabezando la lista, con 8.133,5 toneladas de oro, que representan el 75,8% del total de reservas con que cuenta el país.

A partir de ahí, los cambios han sido muchos y, en algunos casos, han afectado a importantes volúmenes de oro. Comenzando por las compras de metal, la lista que publica el Consejo Mundial del Oro, con datos procedentes del Fondo Monetario Internacional, recoge ya la actualización de las reservas de oro del Banco Nacional de Polonia, que han crecido en nada menos que 99,6 toneladas desde el mes pasado, hasta totalizar 228,2 toneladas.

Esta importante operación de compra, de la que ya dimos cuenta en este periódico hace unas semanas, responde al deseo de las autoridades del país de diversificar las reservas y protegerse ante el aumento del riesgo geopolítico. Además, el Banco Nacional de Polonia, que ha adquirido esas casi 100 toneladas de oro al Banco de Inglaterra, tiene previsto repatriar la mayor parte de las mismas, con el objetivo de custodiar en su territorio al menos la mitad del oro que posee, ante la eventualidad de un conflicto internacional o posibles complicaciones derivadas de un Brexit sin acuerdo.

Por detrás de Polonia y su multimillonaria adquisición, la lista de los compradores incluye los nombres habituales. Rusia, por ejemplo, que ha vuelto a aumentar sus reservas en 16,9 toneladas durante el último mes, con lo que el total se eleva a 2.207 toneladas, cada vez más cerca de Francia.

Por su parte, China prosigue también con su política de adquisición de oro, añadiendo otras 10,2 toneladas a sus arcas, lo que deja el total en 1.926,5 toneladas. Tanto Rusia como China siguen adelante con su política de reforzar sus reservas con oro, con el objetivo de minimizar el papel del dólar como divisa de reserva internacional, al tiempo que se protegen ante eventuales sanciones y las consecuencias de posibles bloqueos comerciales decretados por los Estados Unidos.

En esta misma línea, otros compradores habituales han continuado añadiendo oro a sus reservas: es el caso de Turquía que, con 11,3 toneladas más de metal este mes, eleva sus reservas a 314,1 toneladas, cifra que supera a la de las reservas de oro del Banco de Inglaterra.

También Kazajistán sigue añadiendo oro a sus reservas, con unas compras de 4,4 toneladas en el mes pasado, que elevan el total hasta las 375,3 toneladas, muy cerca ya de la cifra que posee Portugal.

En menos medida han actuado Mongolia (1,1 toneladas más, para un total de 16,9) y Kirguistán (0,4 toneladas adquiridas, con unas reservas totales de 13,2).

Por último, aunque no menos importante, el Banco de Francia ha sorprendido con una pequeña compra de oro (apenas 0,1 toneladas, que elevan el total hasta las 2.436,1), la primera que se registra en los últimos años y que puede ser un indicio de lo que puede suceder en el futuro, después de que a finales del pasado julio se confirmara que el último Acuerdo de los Bancos Centrales sobre el Oro, que expira el próximo mes de septiembre, no se va a renovar, debido a la “madurez del mercado”.

Importantes ventas

Al contrario de lo que ha sucedido en los meses anteriores, la última actualización de la lista publicada por el Consejo Mundial del Oro incluye importantes operaciones de venta de oro por parte de diversos bancos centrales. Unas ventas en las que quizá haya tenido que ver el alto precio alcanzado por el metal durante las últimas semanas, que lo ha llevado por encima de la barrera de los 1.500 dólares la onza.

Cifras máximas que pueden haber puesto en marcha operaciones de recogida de beneficios por parte de algunos bancos centrales, con el objetivo de sanear sus cuentas.

La operación de venta más importante ha sido la realizada por la República de Macedonia, que se ha desprendido nada menos que de 14,6 toneladas de metal, con lo que sus reservas han descendido hasta las 6,9 toneladas. Al precio actual, el oro vendido por Macedonia habría alcanzado en el mercado un precio superior a los 711 millones de dólares.

También ha sido muy significativa la venta de parte de las reservas de oro de Uzbekistán, un país de la órbita de Rusia que últimamente ha protagonizado operaciones de compra de oro para sus reservas. En esta ocasión, el banco central del país ha liquidado 12,4 toneladas de oro, que dejan sus reservas de este metal en 351,5 toneladas.

El tercer banco central que se ha desprendido de más oro en el último mes ha sido el de Argentina, que ha vendido 6,8 toneladas, quedándose con 54,9. Hay que recordar que esta operación se registró antes de la celebración de las elecciones primarias del pasado 11 de agosto, en las que la coalición social-liberal del actual presidente Mauricio Macri fue derrotada por los peronistas.

El Banco Central de México reflejó un saldo negativo de 0,1 toneladas de oro, operación que puede estar relacionada con la acuñación de moneda de inversión por parte de la Casa de la Moneda del país.

Por su parte, uno de los países que más oro acumulan, Alemania, redujo sus reservas de oro en 1,1 toneladas, hasta las 3.366,8. Aunque ya lo había hecho en otras ocasiones, con el objetivo de proporcionar materia prima para la acuñación de monedas de oro por parte del Bundesbank, la importante cuantía vendida en esta ocasión sorprende a los analistas, ya que las cantidades liquidadas en otras ocasiones era de alrededor de 0,1 toneladas.

Como dato llamativo, un mes más las reservas de oro del Banco Central de Venezuela aparecen congeladas en 161,2 toneladas de oro, a pesar de las noticias que periódicamente informan sobre la venta por parte del Gobierno de Nicolás Maduro de importantes cantidades de oro procedentes de las reservas del país.

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