Pasan los años y la lucha por la igualdad en el sector de los metales preciosos no consigue restar espacios. Las diferencias entre la plata y el oro cada vez son más notables en los últimos 8 años, desde que en abril del año 2011 el metal argénteo se aupó hasta los 48 dólares por onza, después, año a año, la diferencia se fue ampliando hasta la fecha en que el ratio es de 93:1 y la plata cotiza a 15,37 dólares la onza.
La relación oro-plata puede calcularse al dividir el precio actual del oro por el precio actual de la plata, y muestra el comportamiento de los metales en comparación.
En la Edad Media, ambos metales preciosos mantenían una relación de 12 a 1. Esta media se actualizó a 15,5 a 1 tras el sistema monetario de bimetalismo de Francia en el siglo XIX.
Después de que la plata sufriera la desmonetización a favor del Patrón Oro, la relación entre los dos metales alcanzó los 30 a 1 durante el comienzo del siglo XX. Durante la Primera Guerra Mundial el ratio oro/plata recuperó su media histórica de 16:1 y nuevamente en 1980 lo volvió a recuperar cuando todo apuntaba a que EEUU entraría en una grave crisis monetaria y la cotización del oro alcanzó brevemente los 800 dólares onza.
Posteriormente, este valor alcanzó un promedio de 58:1 tras la utilización del sistema monetario de divisas en 1971.
La relación oro-plata superó el valor actual de 90 onzas de plata por una onza de oro durante 237 días entre los años 1990 y 1993.
Los valores generados por la proporción tienden a aumentar durante ciclos de inestabilidad económica. Esto se debe a que el precio del oro se desempeña de mejor manera durante periodos de recesión, lo que incrementa el valor de la relación.
La relación entre ambos metales alcanzó un máximo histórico de 100 en 1991, cuando el precio de la plata cayó a mínimos extremos.
Ahora, con el oro a 1.430 dólares la onza y la plata a 15,37 dólares, el ratio sobrepasa los 93:1.
¿Podrá volver la relación del precio del oro y la plata a recuperar su promedio histórico de 16:1?
