La mayoría de los ciudadanos de Turquía sigue prefiriendo invertir en oro antes que en otros instrumentos financieros, según han revelado las conclusiones de una reciente encuesta realizada en el país.
Según un sondeo llevado a cabo por la compañía Areda Survey durante este mes de mayo, los ciudadanos turcos siguen considerando al oro como la apuesta más segura para proteger sus ahorros y obtener rendimientos, ante la crisis que sufre actualmente la economía del país.
En concreto, un 42,9% de los ciudadanos turcos encuestados dice considerar al oro como la mejor inversión. Un resultado mayoritario que, sin embargo, ha sido inferior en porcentaje al obtenido durante la encuesta que la misma firma celebró en abril de 2021, y en el que los partidarios del oro eran el 57,4%.
Por géneros, el 45,9% de las mujeres y el 42,2% de los hombres afirmaron que invertirían en oro, mientras que el porcentaje de jóvenes que consideran el metal precioso como su inversión preferida alcanza el 50%.
El segundo activo de inversión más valorado es el sector inmobiliario, con un 27,4% de los encuestados, frente al 26,9% que alcanzó en la encuesta del año pasado.
En el caso de los inmuebles, el 30% de los jóvenes se decanta por estos activos, mientras que el segundo sector de edad más interesado es el de los mayores de 65 años.
En tercer lugar, los ciudadanos turcos se decantan por las divisas como activo de inversión, con un 23,7% de los encuestados, un aumento significativo con respecto al resultado de la encuesta de Areda Survey del año pasado, donde las divisas apenas representaban el 8,2%.
Le siguen las cuentas de depósito (3,1%), las criptomonedas (1,9%) y las acciones (1%) fueron los siguientes activos de inversión en el orden de preferencias de los encuestados.
En cuanto a los rendimientos objetivos de todos estos activos, según los datos del Instituto de Estadística de Turquía (TÜİK) la Bolsa de Estambul obtuvo el mayor beneficio mensual con un 7,79% ajustado por el IPC en abril, mientras que los titulares de cuentas de depósito y los que invierten en el dólar estadounidense perdieron un 5,67 y un 6,18%, respectivamente, según datos del a principios de este mes.
Por su parte, los inversores en oro vieron cómo el precio del metal caía un 6,39% en términos reales.