El precio del oro superará los 1.900 dólares la onza en 2022 en dos de los tres posibles escenarios previstos por los analistas del banco francés Société Générale. El metal precioso podría llegar hasta los 2.100 dólares la onza si se diera el peor de los escenarios posibles, que contempla una nueva ralentización de la economía global a causa de las nuevas variantes del covid-19.
Las perspectivas del oro para el segundo trimestre del año 2022 son moderadamente optimistas, en opinión de los analistas del banco francés Société Générale, según un informe publicado en estos días.
El informe contempla tres escenarios posibles, en los que el precio del oro oscilaría entre los 1.700 y los 2.100 dólares la onza. Son los siguientes:
Escenario base (50% de probabilidades)
Según señalan los analistas de Société Générale, el precio del oro alcanzaría los 1.900 dólares la onza en un escenario base: “seguimos siendo moderadamente optimistas a corto plazo. A pesar de la nueva nominación de [l presidente de la Reserva Federal, Jerome] Powell y su postura agresiva, nuestros analistas de tipos de interés no contemplan subidas antes del segundo trimestre de 2022. Esto, unido a nuestras actuales previsiones de inflación, apunta a la existencia de tipos de interés negativos, lo que constituye un entorno perfecto para el oro”.
Sin embargo, desde la entidad advierten que esta opinión se basa principalmente en las previsiones de que dejen de salir capitales de los ETF y aumenten las inversiones a partir de finales de este año: “para el segundo semestre de 2022 esperamos que la inflación comience a remitir y que los tipos de interés reales vuelvan a subir, impulsados por el fin del programa de ayudas tras la pandemia y las posibles subidas de tipos por parte de la Fed. Esperamos que la subida de los tipos de interés reales se convierta en un importante obstáculo para el oro a partir del segundo semestre de 2022”.
Escenario de subida (25% de probabilidades)
Para este segundo escenario, desde SocGen estiman una caída del precio del oro hasta los 1.700 dólares la onza: “nuestro escenario de crecimiento económico afectará al precio del oro en caso de que las nuevas variantes del covid-19 puedan combatirse de forma efectiva mediante una alta tasa de vacunación y tratamientos médicos. Esto reduciría la sensación de riesgo para los inversores, lo que es perjudicial para el oro, pero llevaría a reducir las restricciones y, por lo tanto, a aumentar el consumo”.
En este escenario, la caída de la tasa de desempleo en los Estados Unidos hasta niveles anteriores a la crisis podría obligar a la Fed a adelantar la subida de los tipos de interés, respecto a las previsiones del escenario base de Société Générale. Pero para que se den estas condiciones, sería necesario controlar la inflación.
Escenario de bajada (25% de probabilidades)
Por último, el tercer escenario previsto por el banco francés contempla un empeoramiento de la situación económica, que propiciaría una subida del precio del oro hasta superar el nivel máximo que alcanzó en agosto de 2020, llegando incluso a los 2.100 dólares la onza: “nuestro escenario de deterioro económico resultaría muy positivo para el oro, ya que los bancos centrales de todo el mundo tendrían que adoptar políticas monetarias moderadas para que sus respectivas economías tengan la capacidad de superar la adopción de nuevas restricciones provocadas por el covid-19”.
En este escenario más pesimista, el entorno de bajos tipos de interés se mantendría durante más tiempo, combinado con un alto índice de inflación, que podría impulsar el precio del oro hasta los 2.100 dólares la onza a mediados del año que viene.
La inflación seguiría siendo alta, debido a los problemas en la cadena de suministros y a las nuevas restricciones obligadas por las nuevas variantes del coronavirus.