El precio del oro se ha situado por encima de los 1.800 dólares, tras varios días de intentar asaltar esa barrera. El discurso del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en el que ha alertado de que la situación de la economía aún no permite retirar las medidas de apoyo en política monetaria y fiscal, ha tranquilizado a los analistas y ha beneficiado a activos refugio como los metales preciosos.
La intervención del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, tras la reunión del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC) del 28 de julio, ha servido para calmar los ánimos después de la reunión de junio, en la que un simple comentario sobre los tipos de interés sembró la alarma en los mercados y provocó la caída del precio del oro.
En esta ocasión, Powell se mostró muy cauto durante la rueda de prensa y señaló que Estados Unidos no ha alcanzado “un progreso sustancial” como para comenzar a desmontar el programa de recompra de activos puesto en marcha por la Fed, por valor de 120.000 millones de dólares mensuales.
En la reunión, el Consejo de la Reserva Federal decidió mantener intactos los tipos de interés, aunque Powell reconoció ante la prensa que “la economía ha hecho progresos” y que el Comité seguiría vigilando su desempeño durante las próximas reuniones”.
Según Powell, la economía estadounidense aún no ha llegado al punto en el que la Fed podría comenzar a retirar su programa de ayudas: “estamos haciendo progresos y esperamos que las cosas vayan bien… cuando alcancemos nuestro objetivo será el momento de comenzar a desmontar las ayudas”.
El presidente de la Fed añadió también que el banco central estadounidense aún no contempla siquiera la posibilidad de subir los tipos de interés: “estamos aún muy lejos de una subida de tipos”.
La primera reacción del precio del oro fue caer por debajo de los 1.800 dólares la onza. Sin embargo, una vez que Powell comenzó su discurso, la situación se revirtió, con el precio spot alcanzando un máximo diario de 1.808,20 dólares la onza. En estos momentos, el precio spot ha subido hasta los 1.818,50 dólares la onza.
En cuanto a la inflación, Jerome Powell reconoció que se encuentra bastante por encima del objetivo del 2% y que seguirá así durante algunos meses más, antes de que se logre el objetivo de la Fed de conseguir el pleno empleo.
De momento, el presidente de la Fed cree que la inflación seguirá subiendo a corto plazo, mientras que a medio plazo comenzarán a funcionar las medidas aplicadas por la Reserva Federal. “No vamos a sufrir un largo periodo de alta inflación. En cualquier caso, usaremos las herramientas a nuestra disposición para asegurarnos de que la inflación se queda en torno al 2%”, señaló Powell a la prensa.
En su opinión, el término ‘transitorio’ que se ha utilizado para calificar a la actual inflación en los Estados Unidos significa que “es algo que no va a dejar una marca permanente en el proceso de inflación. No significa que los productores dejen de subir los precios. Habrá inflación, pero el proceso se detendrá”, concluyó.