Icono del sitio Oroinformación

El precio del oro alcanzará los 3.000 dólares la onza 2023, según las previsiones de Saxo Bank

Recurso Saxo Bank

La incertidumbre económica mundial y el aumento de las tensiones geopolíticas crearán una ‘economía de guerra mundial’ que dará prioridad a los suministros internos y a los precios máximos, garantizando que la inflación se mantenga persistentemente alta hasta 2023. Un escenario que, llevado a su extremo, será positivo para el oro.

Según las previsiones de Saxo Bank, esta situación extrema podría conducir al oro a un nivel “escandaloso” de hasta 3.000 dólares la onza, superando en caso 1.000 dólares su precio máximo histórico.

En el informe del banco danés, su responsable de estrategia de materias primas Ole Hansen señala que “2023 es el año en el que el mercado descubre por fin que la inflación va a seguir disparada en un futuro previsible”.

Hansen puntualizó, en una entrevista con Kitco News, que este objetivo no es la previsión oficial del banco, sino un experimento sobre lo que ocurriría si se desarrollaran escenarios extremos en la economía mundial: “no se trata tanto de tener razón como de iniciar un debate sobre los retos a los que se enfrenta la economía mundial y cómo afectarán al oro. Fundamentalmente, una economía en guerra es inflacionista y esperamos que los inversores se den cuenta en 2023 de que los bancos centrales no van a ser capaces de mantener la inflación bajo control.

El analista dijo que si la inflación se mantiene persistentemente alta, los inversores se verán obligados a reevaluar las tasas de equilibrio. Cualquier caída de las expectativas de tipos reales debería debilitar el dólar estadounidense.

Hansen subrayó que el oro ha tenido un comportamiento mediocre durante la mayor parte de 2022, ya que los inversores siguen teniendo fe en que los bancos centrales serán capaces de devolver la inflación al 2%. Sin embargo, añadió que 2023 es el año en que esa fe podría tambalearse.

Desde Saxo Bank ven algunos escenarios que siguen apoyando la subida de los precios al consumo a largo plazo, entre ellos un mayor desarrollo de las cadenas de suministro nacionales, con especial atención al sector energético.

Un segundo factor es una mejora de la economía china, que provocaría una demanda generalizada de materias primas.

La Reserva Federal no sólo espera poner fin a su ciclo de endurecimiento a principios de 2023, sino que Saxo Bank afirma que la amenaza de una recesión mundial obligará a los bancos centrales a inyectar liquidez de nuevo en los mercados financieros mundiales.

Estos tres escenarios llevados al extremo son los que harían subir drásticamente los precios del oro, según Hansen. “El oro atravesaría el doble techo cercano a los 2.075 dólares como si no existiera y se lanzaría a por lo menos 3.000 dólares el año que viene”, afirmó.

Aunque la inflación ha caído desde sus máximos del verano, sigue siendo persistentemente alta, incluso cuando la Reserva Federal se prepara para ralentizar el ritmo de su agresivo endurecimiento de la política monetaria.

Los mercados esperan que el banco central estadounidense suba los tipos de interés en 50 puntos básicos en la reunión de política monetaria de la segunda semana de diciembre, y siguen considerando que el tipo de los fondos federales alcanzará un máximo de entre el 5,00% y el 5,25% en el primer semestre del año que viene.

Además de ser una cobertura contra la inflación, Hansen afirmó que el oro seguirá siendo un activo atractivo para los países que deseen reducir su exposición al dólar estadounidense.

Salir de la versión móvil