La publicación del dato de creación de empleo en los Estados Unidos, que ha estado por debajo de lo esperado, ha sido el detonante para que la cotización del dólar haya caído, lo que ha propiciado una subida del 2% en el precio del oro durante la última jornada del mes de septiembre. Aun así, la evolución del metal va a ser negativa durante el tercer trimestre del año, que se cierra en este día.
El precio del oro subió más de un 2% el último día del mes de septiembre, después de que el dólar cayera debido a la publicación del dato semanal de creación de empleo en los Estados Unidos, que estuvo por debajo de lo esperado.
A la hora de escribir este artículo, el precio spot del oro estaba en 1.757,10 dólares la onza, mientras que el ‘fixing’ de la London Bullion Market Association (LBMA) cerró el mes de septiembre a 1.737,15 dólares.
Por su parte, el precio de los contratos de futuros del oro en Estados Unidos ganó un 2% en la sesión, situándose en los 1.757 dólares.
El aumento del desempleo en Estados Unidos durante la última semana despertó la preocupación en el mercado y sembró dudas respecto al calendario de la Reserva Federal para comenzar la retirada de sus programas de apoyo a la economía.
Hay que recordar que la obtención del pleno empleo era uno de los objetivos señalados por el presidente de la Fed, Jerome Powell, para la retirada de las ayudas y el comienzo de la subida de tipos. El último dato negativo podría suponer un retraso en el desmantelamiento del programa de compra de bonos por parte del banco central estadounidense, y eso sería bueno para el oro.
Además, como señalaba el analista independiente Robert Bhar a Reuters, se está detectando una tendencia al aumento de la inversión en oro físico, como medio de protección ante la creciente incertidumbre económica y la subida de la inflación.
Sin embargo, la perspectiva de la reducción de los estímulos por parte del banco central y de una subida de los tipos de interés afectaría al oro, ya que implica una subida del dólar y de los rendimientos de los bonos del tesoro, activos con los que el metal precioso mantiene una correlación inversa, es decir, que cuando unos suben, el oro baja y viceversa.
Como apuntaban recientemente desde Commerzbank en un informe, “un dólar estadounidense más firme y unos mayores rendimientos de los bonos son una combinación tóxica para el oro”.
Según este informe, “a corto plazo, el riesgo de una nueva caída del precio sigue estando presente, lo que significa que el oro podría alcanzar pronto el nivel de los 1.700 dólares la onza. Mientras el oro siga bajo presión, la plata también va a encontrar difícil salir de la dinámica defensiva”.
La plata subió un 2,5% en la última sesión de septiembre, hasta los 22,04 dólares la onza, aunque va a registrar su cuarta caída mensual consecutiva.
Por su parte, el platino ganó un 1,3%, situándose en 962,61 dólares la onza, mientras que el paladio subió un 2,4%, hasta los 1.901,41 dólares.