El precio spot del paladio cayó a su nivel mínimo en más de un año, continuando con una tendencia descendente en la cotización del metal motivada por las dudas sobre la demanda del metal por parte de la industria automovilística y las perspectivas de su sustitución por platino en la fabricación de catalizadores.
El paladio, cuyo precio había registrado un nuevo récord a principios de mayo, superando los 3.000 dólares la onza, cayó por cuarto día consecutivo hasta alcanzar su nivel más bajo desde agosto de 2020.
En el momento de escribir este artículo, el precio spot del metal ronda los 2.211 dólares la onza, mientras que el fixing de la London Bullion Market Association (LBMA) cerró la sesión del 8 de septiembre a 2.347 dólares.
Según un reciente informe del Consejo Mundial de Inversiones en Platino (WPIC), se espera que el mayor coste del paladio, utilizado en la fabricación de dispositivos de control de emisiones contaminantes, provoque un cambio gradual en los fabricantes, que van a utilizar más platino.
Ambos metales, paladio y platino, se están viendo afectados, según este informe, por la falta de suministro de semiconductores que afecta a la industria automovilística.
En opinión de Ed Meir, analista de ED&F Man Capital Markets, “ambos metales, especialmente el paladio, se han visto afectados esta semana; creemos que las dificultades por las que atraviesa el sector global de automoción han pesado en la demanda de metales del grupo del platino”.
El crecimiento del precio del paladio durante los últimos años lo ha llevado a superar ampliamente tanto al oro como al platino, rebasando incluso la barrera histórica de los 3.000 dólares la onza.
Ello ha provocado que el sector del automóvil se plantee su sustitución por platino, más barato, en la fabricación de catalizadores para los vehículos con motor de gasolina. Sin embargo, varios sectores de la industria han puesto en duda este proceso de sustitución, que puede resultar costoso y suponer un ahorro inapreciable.