Una vasija de barro que contenía varias decenas de monedas de plata y fragmentos de brazaletes de, al menos un millar de años de antigüedad, ha sido desenterrada en la Isla de Man por una aficionada a la búsqueda de tesoros con detector de metales.
Como publica la BBC, la responsable del hallazgo ha sido la ex oficial de Policía Kath Giles quien ‘armada’ con un detector de metales, localizó en un campo situado al norte de la isla una vasija de barro que albergaba 87 monedas de plata y 13 fragmentos de brazaletes (ver imagen).
Según los expertos, podría tratarse de una especie de hucha cuyo propietario había escondido deliberadamente las piezas, 87 monedas de plata acuñadas hace unos 1.000 años, con la intención de recuperarlas más adelante.
Los pormenores del hallazgo solo se han conocido ahora, una vez que el juez de guardia ha emitido su informe sobre el caso y se ha declarado oficialmente la condición de tesoro.
Las monedas, que fueron acuñadas entre los años 1000 y 1035 d. C., proceden de diversos países: Inglaterra, Irlanda, Alemania y la propia Isla de Man.
Según la conservadora de arqueología del Museo Nacional del Patrimonio de Man, Allison Fox, se trata de “un hallazgo maravilloso, que ayudará a comprender mejor la compleja economía de la época vikinga en la zona que rodea al Mar de Irlanda”.
Según la especialista estadounidense en numismática, Kristin Bornholdt-Collins, quien ayudó a identificar la procedencia y antigüedad de las monedas, el tesoro podría ser una especie de hucha de la época vikinga, lo que explicaría la presencia de algunas de las monedas más antiguas.
La teoría de la experta es que el propietario del tesoro podría haber seguido añadiendo piezas después de haberlo enterrado, ya que la mayoría de las monedas son un reflejo de las que circulaban por esa zona de la isla en esa época.
Junto a la hucha se encontraron también 13 fragmentos de brazaletes de plata, que se utilizaban también como monedas.
El conjunto de piezas será expuesto en el Museo de Man antes de ser trasladado a Londres para su tasación. Según las leyes vigentes en la Isla de Man, los hallazgos de interés arqueológico deben comunicarse al Patrimonio Nacional de Man.
Los que sean oficialmente declarados como tesoros, pasarán a ser propiedad de la Corona y el responsable de su hallazgo será recompensado.
En este caso, la ex oficial de Policía Kath Giles ya conoce el funcionamiento del sistema, ya que fue también la autora del hallazgo, hace unos meses, de un conjunto de joyas vikingas de oro y plata, que fueron declaradas oficialmente como tesoro el pasado mes de febrero.