El platino es 30 veces más raro que el oro y solo se encuentra en muy pequeñas concentraciones en la corteza terrestre. La producción mundial anual apenas asciende a 190 toneladas, el 6% de las cuales procede de los Estados Unidos, que es una de las únicas tres regiones del mundo donde se encuentra en volúmenes significativos.
La producción mundial de platino procedente de la minería es de apenas 190 toneladas anuales, una cantidad que queda ridícula en comparación con las más de 3.500 toneladas de oro que se extraen al año, e insignificante si se compara con los miles de toneladas de plata.
Un 6% de esa producción mundial de platino procede de Norteamérica, que es una de las únicas tres regiones de la Tierra, junto a Sudáfrica y Zimbabue. Más del 80% de la producción mundial procede de Sudáfrica, que es donde se encuentran las principales minas y donde operan las principales compañías mineras del sector, que ejercen también de lobby mediante la creación de organismos como el Consejo Mundial de Inversión en Platino (WPIC, por sus siglas en inglés).
La producción total de platino procedente de Norteamérica en 2018 fue de un millón de onzas (31,1 Tm), que incluía 355.000 onzas (11,04 Tm) procedentes de las minas de platino y 645.000 (20,06 Tm) obtenidas del reciclaje de catalizadores y de joyas.
La demanda total de platino en la región el año pasado fue de 1,09 millones de onzas (33,9 Tm), de las que el sector de la joyería acaparó 305.000 (9,5 Tm), el 28%. Se estima que esta demanda del sector joyero va a crecer un 5% en 2019, hasta las 320.000 onzas (9,95 Tm).
El mercado estadounidense de la joyería de platino se está beneficiando de la combinación entre el bajo precio actual del metal (que tradicionalmente era más caro que el oro) y de la fortaleza de la economía del país.
La mayor parte de la demanda procede del sector de las bodas, ya que las alianzas de platino se pusieron de moda hace años y cada vez cuentan con una mayor cuota de mercado.
También está creciendo el porcentaje de demanda de joyas de platino por parte de consumidores que los compran para su propio disfrute.
Aun así, el mayor demandante mundial de platino sigue siendo la industria del automóvil, que lo utiliza para la fabricación de catalizadores para los vehículos con motor diésel.