La revista Aseguranza, líder en el sector asegurador, publica un interesante artículo sobre la revalorización del oro y la plata durante este complicado año 2020, en el que se incluyen declaraciones del presidente de SEMPI Gold España, Gabriel Ruiz, en las que recomienda confiar parte de nuestros ahorros a adquirir metales preciosos.
En su número de octubre, la revista Aseguranza, publicación líder dentro del sector asegurador, aborda en su sección dedicada a ahorro e inversiones la revalorización experimentada por oro y plata en lo que llevamos de año 2020.
El artículo incluye declaraciones del presidente de SEMPI Gold España, Gabriel Ruiz Ramírez, en las que aconseja destinar una parte de nuestros ahorros a adquirir oro y plata físicos, como medida de precaución para proteger nuestro patrimonio y mantener el poder adquisitivo en tiempos de crisis económica como los que estamos atravesando en estos momentos.
Por su interés, reproducimos a continuación el texto de dicho artículo:
“Los metales preciosos se han puesto de moda entre los inversores en este aciago año 2020, que ha traído consigo la Covid-19 y una posterior crisis económica comparable a la de 2008. En este entorno, el oro y la plata han hecho valer su carácter de activos refugio, con atractivas revalorizaciones y, en el caso del primero, alcanzando su precio máximo histórico.
El oro cotizaba el 2 de enero a 1.527,10 dólares la onza en la London Bullion Market Association (LBMA), el mercado de Londres. A la hora de escribir estas líneas, el 18 de septiembre, su precio era de 1.950,85 dólares la onza, lo que representa una revalorización del 27,75%.
Pero 2020 ha sido histórico para el oro por más razones: el 4 de agosto, su precio alcanzaba los 1.977,90 dólares la onza en la LBMA, superando su anterior récord de septiembre de 2011. Y un par de días después registró su precio más alto hasta el momento: 2.067,15 dólares la onza.
Varios factores le han permitido alcanzar estas cifras. Uno es la inestabilidad geopolítica y económica internacional, en especial los perjuicios causados por la pandemia, que ha provocado que los inversores huyan de activos con mayor riesgo hacia otros considerados tradicionalmente como refugios: los metales preciosos.
Por otro lado, los tipos de interés cercanos a cero han provocado la caída de los rendimientos de activos como los bonos del tesoro, que compiten con el oro por el favor de los inversores.
A ello hay que añadir las medidas de emergencia adoptadas por los bancos centrales, que van a hacer crecer la inflación y benefician a los metales preciosos.
No solo el oro; también la plata se ha convertido en protagonista en este 2020. Su revalorización ha sido aún más espectacular: de los 17,925 dólares la onza del 2 de enero, ha subido hasta un máximo de 28,885 dólares la onza el 1 de septiembre, un 61,14%.
Al cierre del 18 de septiembre cotizaba a 27,060 dólares la onza, lo que representa casi un 51% de subida en lo que llevamos de año.
La plata se ha convertido también en una inversión muy recomendable, gracias a la dinámica que lleva y que le ha permitido más que duplicar su precio, desde el mínimo de 12 dólares la onza de mediados de marzo.
Además, sigue siendo un metal históricamente barato con respecto al oro y cuenta con un precio de entrada más bajo para los inversores, ya sea en forma de monedas de inversión (bullion) o pequeños lingotes.
Como señala Gabriel Ruiz, presidente de SEMPI Gold España, “ante la actual situación, es una buena elección destinar parte del excedente monetario a adquirir oro o plata físicos, que servirán para proteger el patrimonio y garantizar nuestro poder adquisitivo, en vez de en dinero ‘fiat’, creado a partir de deuda”.
Desde SEMPI Gold España facilitan a los clientes la compra programada de oro y plata en diversos formatos, por medio de una serie de planes pioneros en nuestro país”.