El banco de inversión estadounidense Goldman Sachs ha señalado en un informe reciente que espera que el precio del oro protagonice una importante subida, al atraer la atención de los inversores como elemento de diversificación de sus carteras, en especial su comienza a ralentizarse el crecimiento de la economía de los Estados Unidos.
En su último informe, publicado el pasado 26 de noviembre, los analistas de Goldman Sachs apuestan por la subida del precio del oro, ya que la ralentización del crecimiento de la economía estadounidense va a poner en valor una de las propiedades de un activo como el oro: su condición de elemento diversificador de la cartera de inversión.
“Creemos que añadir oro a la cartera de inversión supone un importante elemento diversificador. Si la economía de los Estados Unidos ralentiza su crecimiento a partir del próximo año, como se espera, el oro podría beneficiarse de un aumento de su demanda como activo defensivo. En este punto del ciclo inversor, el oro resulta especialmente atractivo como elemento de diversificación de las inversiones, dado que los bonos del tesoro a largo plazo, que tradicionalmente se han considerado activos refugio, pueden verse perjudicados en caso de repunte de la inflación en EEUU”, señalan desde Goldman Sachs.
Otro factor que influye positivamente en el oro es el aumento de la demanda por parte de los bancos centrales, algunos de los cuales han acudido al mercado por primera vez desde el año 2012.
Desde el banco dudan de que el precio del oro siga a la baja y apuestan por un rebote, teniendo en cuenta que la posición de fortaleza del dólar estadounidense comienza a remitir. Y concluyen destacando que “el mercado ya ha descontado 10 de las 12 subidas de tipos de la Reserva Federal que esperamos”.
Paladio
Por otro lado, el informe estima también que el paladio va a seguir superando en revalorización al platino, al menos hasta que la industria del automóvil (la principal consumidora de ambos metales), comience a sustituir el primero por el segundo en la fabricación de catalizadores.
El paladio se encuentra en situación de déficit de suministro desde que Rusia terminó de liquidar sus stocks, en 2012-2013, mientras que la situación del mercado del platino es la opuesta, un superávit que se debe a la reducción del número de vehículos diésel (en la fabricación de cuyos catalizadores se utiliza este metal), además de a la debilidad de las cifras de demanda por parte del sector de la joyería en China.
En opinión de los analistas de Goldman Sachs, para que se revierta esta situación en ambos mercados, será necesario que “existan evidencias de una sustitución significativa de paladio por platino en la fabricación de catalizadores. Creemos que a corto plazo es difícil que esto suceda, ya que el paladio ofrece un mejor rendimiento bajo las extremas condiciones de los nuevos tests de emisiones, y todavía se tardará algunos años en desarrollar, probar y adoptar un nuevo catalizador basado en platino”.