Las fuerzas opuestas en el mercado proporcionarán al oro una pequeña dirección de cara al nuevo año. Sin embargo, los analistas de Goldman Sachs mantienen su perspectiva alcista hasta 2021. En un informe publicado el viernes, el banco de inversión dijo que mantendrá su precio objetivo del oro para 2021 de 2.300 dólares la onza mientras la economía mundial se equilibra entre las noticias positivas de posibles vacunas para el virus Covid-19 y los riesgos a corto plazo de una mayor devastación económica.
Aunque los economistas de Goldman Sachs esperan ver una fuerte recuperación económica en los Estados Unidos y en todo el mundo, los analistas de materias primas Jeffrey Currie y Mikhail Sprogis, autores de un informe sobre el metal precioso, dijeron que todavía hay un “caso estratégico sólido para el oro”.
“En nuestra opinión, el mercado alcista estructural para el oro no ha terminado y se reanudará el próximo año a medida que las expectativas de inflación suban, el dólar estadounidense se debilite y la demanda minorista de los mercados emergentes continúe recuperándose”, dijeron los analistas. “A corto plazo, sin embargo, puede ser difícil para el oro generar un impulso significativo en una dirección más alta o más baja”.
En cuanto a lo que impulsará los precios del oro al alza el próximo año, los analistas dijeron que continúan observando los rendimientos reales de los bonos, lo que incluye la inflación. Específicamente, dijeron que una caída en los rendimientos reales a cinco años continuará apoyando al oro.
“Según nuestro pronóstico (asumiendo nuestro pronóstico de petróleo alcista), las tasas reales de Estados Unidos a corto plazo promediarán un -2,1% durante los próximos cinco años. El rendimiento a cinco años es actualmente del -1,2%, lo que implica un potencial a la baja importante”, dijeron los analistas de Goldman Sachs.
Currie y Sprogis señalaron además que están prestando mucha atención a los bonos a cinco años porque tienen el mayor impacto en los mercados de divisas. A medida que aumenta la inflación, los consumidores pueden esperar ver una degradación significativa en las monedas globales.
“Creemos que la mayor parte de las compras de oro que se realizaron este año fueron realizadas por inversores que estaban más preocupados por el poder adquisitivo real del dólar frente a las pérdidas en sus carteras de acciones”, dijeron.
Goldman Sachs afirmó que también prevé un resurgimiento de la demanda de oro en los mercados emergentes en 2021.
“La demanda de oro de China e India ya muestra signos de normalización. Las primas de oro de China e India están aumentando gradualmente y casi han vuelto a los niveles anteriores a la Covid. La victoria de Biden en las elecciones y las noticias sobre vacunas deberían seguir impulsando las monedas de los consumidores de mercados emergentes a medida que los riesgos de tarifas son menores, lo que respalda su poder adquisitivo”, dijeron los analistas según Neils Christensen que recogió las declaraciones para “KitcoNews”.