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Inflación, subidas de tipos y ómicron: lo que le espera al oro el año que viene

Subida de tipos de interés

El oro ha estado cotizando en un margen muy estrecho durante el mes de diciembre, oscilando en torno a los 1.800 dólares la onza. Si no hay sorpresas, el precio del metal cerrará el año 2021 casi en el mismo punto que lo empezó. Para 2022, la evolución del metal va a depender de factores como el estado de la inflación, los tipos de interés y el nivel de contagios de las nuevas variantes del coronavirus.

La Perth Mint, Casa de la Moneda de Australia Occidental, acaba de publicar su informe resumen del año, con las estimaciones para 2022. En dicho informe, su analista de mercados Jordan Eliseo subraya que el precio del metal apenas se ha movido durante 2021 y cerrará el año con una caída del 4% en dólares estadounidenses y una subida del 3% en dólares australianos.

Los comienzos del año fueron complicados, con caídas cercanas al 10% en ambas divisas. Desde sus mínimos registrados en el mes de marzo, el oro se ha apreciado un 14% en dólares australianos y un 7% en dólares USA, impulsado por la preocupación ante la subida de la inflación, que se ha disparado en EEUU desde el 1,5 al 6,8% anual en noviembre.

También ha ayudado a esta subida de los últimos nueve meses la caída que han registrado los rendimientos reales de los bonos.

Entre los factores adversos, que han impedido que el precio del metal subiera, el informe destaca tres: la subida del Índice Dólar (que compara la divisa estadounidense con otras seis divisas internacionales) un 7% en lo que llevamos de año; la subida de las previsiones de crecimiento de la economía global por parte de la OCDE, del 4,2 al 5,7%; y la importante subida de las bolsas y otros activos de riesgo (el S&P 500 se ha revalorizado un 23% en 2021).

La evolución del oro a lo largo de 2021 también se ha visto afectada por la importante salida de capitales desde los ETF y la reducción de las posiciones largas en los mercados de futuros. Ello, a pesar de que la demanda por parte de los consumidores no solo se ha recuperado de la pandemia, sino que ha superado las cifras registradas en los tres primeros trimestres de 2019.

Previsiones para 2022

De cara al año que viene, el informe de la Perth Mint señala los principales factores que van a influir sobre el precio del oro en 2022.

Entre los factores desfavorables destacan la posibilidad de que la tasa de inflación en Estados Unidos se reduzca; las tres subidas de tipos de interés proyectadas por la Reserva Federal para 2022; y la progresiva subida del dólar.

Según Jordan Eliseo, el hecho de que no se produjera una liquidación masiva de las posiciones en oro durante la semana pasada sugiere que la aceleración de la retirada del programa de ayudas y el anuncio de una postura más agresiva en cuanto a las subidas de tipos por parte de la Fed ya habían sido descontadas por el mercado.

Por el lado positivo, el elevado precio que han alcanzado las acciones hace pensar en que se va a producir una corrección que hará que los inversores busquen un activo refugio, en especial debido a los bajos rendimientos nominales y reales en los mercados de deuda soberana.

Además, hay que contar con la incertidumbre provocada por la aparición de la variante ómicron del coronavirus, que ha provocado que algunos países comiencen a adoptar medidas de confinamiento, y por situaciones como la crisis energética en Europa o riesgos geopolíticos como las tensiones entre Rusia y Ucrania.

A pesar de que el oro no ha registrado un crecimiento positivo durante este año 2021, desde la Perth Mint creen prematuro afirmar que el metal precioso no ha cumplido su función de elemento de protección frente a la inflación.

Según Eliseo, aunque la Fed solo ha dejado de calificar la inflación como transitoria muy recientemente, el mercado no acaba de creerse que vaya a permanecer durante mucho tiempo.

La previsión de inflación a cinco años está ahora en el 2,65%, mientras que a diez años se sitúa por debajo del 2,40%. Esto significa que la diferencia entre la actual tasa anual del IPC (6,8%) y la previsión a diez años (2,40%) es la más alta desde que hay registros: un 4,4%. Solo durante la crisis financiera de 2008 se llegó a una cifra similar.

En conclusión, desde la Perth Mint creen que hay margen para que la inflación se reduzca, aunque siga superando las expectativas del mercado durante 2022.

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