La inversión en oro, cumpliendo unas condiciones determinadas, dejará de ser ilícita después de la última modificación de la Ley Islámica o Sharia, acometida por un grupo de estudiosos y aprobada a finales de noviembre por la Accounting and Auditing Organization for Islamic Financial Institutions (AAOIFI), con sede en Bahrein.
Como ya hemos publicado, los expertos islámicos han aprobado una serie de nuevas reglas para las transacciones con oro, que podrían abrir el camino a que instituciones del mundo islámico comiencen a negociar de forma mucho más activa con oro y plata.
Según esta normativa recientemente aprobada, las transacciones en oro deben estar respaldadas en su totalidad por oro físico y deben liquidarse en el mismo día, para acomodarse a la distinción que ejerce el Islam entre la actividad económica y la especulación.
Hasta ahora, el oro había desempeñado un papel secundario en las finanzas islámicas, limitado a muy pocas actividades más allá de transacciones al contado, debido a la incertidumbre existente sobre lo que era religiosamente ortodoxo. La nueva reglamentación, que también se aplica a la plata, va a contribuir a cambiar esta situación.
La AAOIFI ha pasado cerca de un año elaborando las nuevas normas sobre las transacciones con oro, que fueron finalmente aprobadas el pasado mes de noviembre, con la colaboración del World Gold Council (Consejo Mundial del Oro). Su objetivo era clarificar las normas islámicas existentes y facilitar la supervisión de las transacciones más complejas.
Las nuevas reglas van a contribuir a aumentar la aceptación de los productos basados en el oro entre los inversores islámicos, además de proporcionar nuevas herramientas de gestión de liquidez a los bancos, según afirmó a Reuters Hamed Hassan Merah, secretario general de AAOIFI, cuyas directrices son seguidas por los bancos del mundo que respetan la Sharia.
Esta organización también insta a los inversores a que completen las operaciones en el mismo día. Muchas operaciones convencionales con oro se liquidan dos días después de la negociación; al eliminar este retraso, las operaciones en el mismo día implican menos riesgos, pero al mismo tiempo pueden resultar menos convenientes para los inversores que quieren tener el dinero en mano.
“Ya se han estado desarrollando diversos productos con anterioridad a la aprobación de las normas”, aseguró a Reuters Natalie Dempster, directora de bancos centrales y política pública del Consejo Mundial del Oro. Dempster explicó también que las normas permiten la compra de oro por medio de agentes, lo que permitirá el acceso a los ETF y a plataformas de negociación online.
Muchas entidades interesadas
Como es lógico, la nueva reglamentación ha atraído el interés de los bancos islámicos de los Emiratos Árabes Unidos y Turquía.
La incertidumbre sobre cómo se podía utilizar el oro en las finanzas islámicas ha ralentizado hasta ahora tanto el desarrollo de nuevos productos como la demanda por parte de los inversores. El regulador de los mercados de Malaysia emitió una guía para ETF islámicos basados en oro y plata en 2014, pero aún no se han lanzado nuevos productos.
Cinco años antes, en 2009, el Consejo Mundial del Oro y el Dubai MultiCommodities Centre lanzó un producto islámico negociado en bolsa, basado en oro, que finalmente fue desautorizado.
Después de la aprobación de estas normas, la compañía comercializadora de oro GoldCore, con sede en Dublín (Irlanda), planea poner en marcha en el primer trimestre de 2017, una plataforma de negociación en oro respetuosa con la Sharia, para que la utilicen las instituciones financieras islámicas.
La nueva plataforma está destinada a ofrecer cuentas de oro segregadas, con la opción de entrega del oro físico, según han explicado desde la plataforma.
Por su parte, Konooz Capital, compañía con sede en Dubai, estudia el lanzamiento de bonos islámicos o “sukuk” referenciados al oro, a través de un programa de 5.000 millones de dólares, que ya fue registrado en 2014. El programa utiliza una estructura denominada “wakala”, en la que una parte actúa como el gestor de una cartera de activos y cobra unas comisiones por la gestión.
El mes pasado, el Islamic Development Bank (Banco de Desarrollo Islámico) y la Bolsa de Estambul (Turquía) comunicaron que estaban desarrollando una plataforma de negociación en oro para la mayoría de países musulmanes.
Además, algunos bancos islámicos, como el Kuwait Finance House o el Banco Muamalat de Malaysia ya ofrecían productos de inversión en oro, mientras que el Bullion Management Group de Toronto (Canadá) cuenta desde 2009 con dos fondos acreditados como respetuosos con la Sharia.
La compañía inglesa ETF Securities, por su parte, lanzó en 2008 una serie de productos basados en platino, paladio, plata y oro físicos, que cumplían las normas de la Sharia.
Desde AAOIFI planean impartir en Oriente Medio cursos de formación para aclarar a los comerciantes en oro cómo deben aplicar las nuevas reglas en sus operaciones diarias.