Los dos próximos años van a ser muy importantes para Japón: en abril de 2019, el actual emperador Akihito abdicará en su hijo, Naruhito; y en 2020 tendrán lugar los próximos Juegos Olímpicos, que se van a celebrar en Tokyo. Ambos eventos van a tener una repercusión en la demanda de oro del país, ya que los actos conmemorativos incluyen la acuñación de monedas.
Según explican desde el diario chino South China Morning Post, el recién iniciado Año del Perro va a resultar muy positivo para el oro, con subidas de precio de entre el 10 y el 15%. Un año en el que Japón va a incrementar su demanda de metal, con vistas a los eventos que se van a celebrar durante los dos próximos años en el país.
Durante el Año Lunar recién concluido, el precio del oro creció un 10% y las perspectivas para este año son también muy optimistas, por diversos factores apuntados por los analistas: el incremento de la demanda por parte de Japón, la debilidad del dólar estadounidense, las correcciones en los mercados de capitales y las tensiones políticas en Europa por el Brexit.
Según la tradición, el Gobierno japonés va a acuñar monedas de oro para conmemorar el ascenso al trono del crisantemo del nuevo emperador, Naruhito, en mayo de 2019. Además, Tokyo va a ser la sede de los Juegos Olímpicos de 2020, un motivo que también va a ser conmemorado con la acuñación de monedas de oro.
Con vistas a estas nuevas emisiones de monedas de oro, el país tendrá que adelantar a 2018 la compra del oro necesario. Se espera que estas compras se realicen a partir del segundo semestre del año, lo que, según los analistas, va a contribuir a incrementar aún más el precio del oro
Según señala Jasper Lo Cho-yan, vicepresidente de iBest, en South China Morning Post, el precio del oro alcanzará los 1.450 dólares la onza a finales del presente año y puede ascender hasta los 1.550 dólares en 2019.
Durante el pasado 2017, el precio del oro se vio impulsado por la tensión entre los Estados Unidos y Corea del Norte, además de por la debilidad del dólar, que el pasado mes de enero registró su nivel más bajo frente a las principales divisas mundiales.