Pese a que apenas han transcurrido unas semanas desde que Rusia invadió Ucrania, los efectos de esta guerra en territorio europeo ya se están dejando sentir en el mercado de los metales preciosos y pueden afectar a las previsiones de suministro y demanda para este año. En el caso de la plata, el hecho de que se trate al mismo tiempo de un metal precioso y de una materia prima industrial, las consecuencias pueden ser muy relevantes para la economía global.
En su último informe Precious Metals Weekly, la consultora británica Metals Focus analiza la repercusión de la guerra en Ucrania sobre las previsiones de suministro y demanda de plata para el año 2022.
Comenzando por el suministro, los analistas de Metals Focus estiman que la producción de plata en Rusia permanecerá en los mismos niveles que en 2021. La cifra se ha revisado a la baja tras conocerse la suspensión de las operaciones en Rusia por parte de la minera canadiense Kinross Gold. Entre las minas cerradas está la de Kupol, que produjo 3,3 millones de onzas (102,6 Tm) en 2021.
Aunque el sector minero de la plata cuenta con una importante financiación interna en Rusia, desarrollada a partir de la imposición de las primeras sanciones por parte de Estados Unidos en 2014, las nuevas sanciones a raíz de la invasión de Ucrania van a eliminar la financiación externa, lo que complicará el desarrollo de nuevos proyectos.
Por otro lado, desde el punto de vista de los costes, el colapso del rublo debería suponer una reducción de los mismos, calculados en dólares, aunque también va a afectarles el aumento de los precios de la energía y la subida de la inflación en Rusia.
Reciclaje
En cuanto al reciclaje, el desplome del rublo ha provocado que se alcancen nuevos máximos históricos en el precio local de la plata: solo entre el 23 de febrero y el 17 de marzo, este precio ha subido un 29%.
Lógicamente, de mantenerse este precio, se producirá un gran incremento del volumen de joyas y objetos de plata reciclados. En 2021, el volumen de plata reciclada en Rusia alcanzó su máximo de los últimos nueve años, cantidad que podría superar este año si se siguen dando estas condiciones.
Pese a ello, desde Metals Focus señalan que Rusia apenas aporta el 6% del volumen global de plata reciclada y no esperan que en 2022 aumente de forma significativa el reciclaje en el mundo, pese al incremento en el precio del metal.
Demanda
Por lo que se refiere a la demanda, la consultora señala que la crisis de Ucrania va a impactar en diferentes sectores, principalmente en el de inversión en plata física (lingotes y monedas), que puede mostrar una elevada volatilidad.
Para este año esperan que la demanda global de inversión en plata física se acerque a la cifra global de 2021, aunque se quedará muy por debajo de las cifras récord que registró en 2015.
Según el informe, esto va a depender de la volatilidad que muestre el precio del metal y el impacto que vaya a tener en la India, ya que los mercados occidentales están funcionando al límite de su capacidad y no cabe esperar un aumento en sus cifras anuales.
Las previsiones relativas a los otros dos sectores de demanda que dependen del nivel de los precios, joyería y platería, son inciertas y dependerán de factores como la volatilidad y el nivel que alcance el precio.
Por lo que respecta a la demanda industrial, desde Metals Focus subrayan la importancia de un factor clave: la escasez de chips. “Antes de la invasión de Ucrania, se esperaba que esta escasez remitiera para finales de 2022, lo que permitiría que volviera a crecer la producción de vehículos. Sin embargo, la situación actual es incierta, dado el importante papel que desempeña Ucrania en la cadena de suministros”, apuntan los analistas de la consultora.
Todo ello podría afectar a diversos sectores, especialmente el automovilístico y el de productos electrónicos, que también se van a ver lastrados por los altos niveles de inflación, que afectan a la renta disponible de los consumidores.
En cambio, el principal sector industrial demandante de plata, el de placas solares fotovoltaicas, va a salir indemne de la crisis de Ucrania debido al impulso existente hacia las energías renovables y la eliminación de la huella de carbono. Incluso, se va a ver beneficiado por el encarecimiento de los combustibles fósiles.
En conclusión, la demanda de plata por parte del sector industrial tiene pocos riesgos de reducirse durante 2022 y va a mostrar un nivel muy saludable.