El precio de la plata promedió los 25,13 dólares la onza en 2021, registrando un 17% de variación entre su precio máximo (29,45 dólares la onza) y el mínimo (21,70) anual. El año 2022 se presenta más positivo para este metal, cuya demanda se verá impulsada por el aumento del número de instalaciones de paneles solares y el crecimiento del sector de la inversión, más interesado que otros años en los metales preciosos por la subida de la inflación.
En su último informe Precious Forecast 2022, los analistas de la refinería alemana Heraeus examinan los factores que van a marcar el camino de la plata durante este año.
Según este informe, una de las claves va a ser el aumento de la demanda industrial, en especial por parte del sector solar fotovoltaico. Para 2022 está previsto que las instalaciones crezcan a un ritmo de dobles dígitos y superen los 200 GW por primera vez, tan solo cinco años después de haber alcanzado los 100 GW.
Se espera que estas instalaciones crezcan en mercados clave como China, India, Estados Unidos y Europa, especialmente por parte de los sectores residencial, comercial e industrial.
El informe apunta también posibles contratiempos. Uno de ellos viene dado por los problemas en la cadena de suministros global (en especial, en el suministro de polisilicatos), que se irán resolviendo a partir de 2023, con la entrada en funcionamiento de nuevas instalaciones.
Otro posible contratiempo es la inestabilidad política en China, que es uno de los principales mercados mundiales de paneles solares.
“La aceleración del cambio del sector energético global desde los combustibles fósiles a las energías renovables garantiza que el sector solar fotovoltaico va a seguir registrando un aumento anual de su crecimiento, lo que apoyará la demanda de plata”, señalan desde Heraeus.
Sector eléctrico y electrónico
Otro sector industrial que está incrementando su demanda de plata es el eléctrico y electrónico. La recuperación de la economía tras la pandemia se ha plasmado en una recuperación de las ventas globales de teléfonos móviles, impulsada a su vez por el despliegue de las redes 5G y por la reducción en el coste de los dispositivos compatibles.
Para 2022 se espera que las ventas de teléfonos móviles alcancen los 1.390 millones de aparatos, un 3,8% más que el año pasado.
La producción de dispositivos 5G va a alcanzar este año los 660 millones de unidades, que representan el 47,5% del mercado global.
A ello hay que añadir el aumento de la demanda electrónica relacionada con el sector de automoción, que va a crecer este año ligeramente, impulsada por el menor impacto de la escasez de chips semiconductores y por el aumento de la producción global de vehículos.
Producción minera
En cuanto al suministro de plata procedente de la minería, para 2022 los analistas de Heraeus esperan una caída con respecto al año anterior, en el que se produjo un notable rebote en comparación con 2020, el año de la pandemia. El suministro minero regresa así a la tendencia descendente que ha protagonizado en los últimos años: “la producción minera está en declive desde 2016 y, a pesar del crecimiento de la demanda y de la subida del precio, hay escasas posibilidades de aumentar el suministro, ya que la mayoría de la plata se extrae como subproducto del oro y otros metales”, señalan. Esta caída se verá compensada por el aumento del suministro procedente del reciclaje.
Por su parte, la demanda del sector joyero y platero va a estar marcada durante 2022 por la recuperación de la economía de la India, el mayor mercado global de joyería de plata.
La previsión de los analistas de Heraeus es que la plata cotice a un precio mínimo de 20 dólares la onza y a un máximo de 32 dólares durante 2022.