El impuesto sobre la importación de oro u otros metales preciosos aumentará desde el 10% actual al 12,5% en la India, según ha confirmado el ministro de Finanzas Nirmala Sitharaman en la presentación de los nuevos presupuestos federales. Una decisión que afectará a los comerciantes de este metal en el país, que es el segundo mayor consumidor mundial de oro después de China.
El ministro de Finanzas de la India, Nirmala Sitharaman, confirmó la noticia durante la presentación de los presupuestos federales del Gobierno que preside Narendra Modi: el impuesto que grava la importación de metales preciosos va a aumentar un 2,5%, hasta el 12,5%.
Como señalan desde Bloomberg, este aumento del impuesto de importación es el primero que se produce desde el año 2013 y ha provocado un doble efecto inmediato: por un lado, el precio del oro en la divisa local, la rupia, se ha disparado hasta cifras récord; por otro, las acciones de las compañías dedicadas a la fabricación y venta de joyas se han desplomado en la bolsa.
La India es el segundo mayor consumidor mundial de oro, por detrás de China, aunque, a diferencia de este país (que también es el mayor productor mundial de oro), cuenta con una minúscula producción local. Por ello, el país se ve obligado a importar la práctica totalidad del oro que consume, lo que produce un efecto negativo, incrementando su déficit en cuenta corriente.
Éste fue el principal motivo que obligó al Gobierno indio a incrementar hasta en tres ocasiones los impuestos sobre la importación de oro en el año 2013. Desde entonces, el tipo de este impuesto había permanecido sin modificarse.
Ahora, el recientemente reelegido Narendra Modi ha puesto fin a seis años de congelación del impuesto sobre la importación del oro.
El volumen de oro importado por la India se ha visto afectado por las medidas adoptadas por el Gobierno para reducir su déficit comercial y para impedir que sea un vehículo utilizado para evadir impuestos y blanquear capitales.
Sin embargo, estas medidas han provocado también un efecto no deseado: el aumento del contrabando de metal, que llega a la India en avión y en tren desde los países vecinos.
El precio del oro en la divisa local ha reflejado el crecimiento de los precios del oro en dólares y se estima que, si sigue aumentando, la demanda se va a ver muy afectada durante la temporada festiva y de bodas, que se extiende desde agosto a diciembre, y durante la que los ciudadanos indios realizan importantes compras de oro.
Desde el Consejo Mundial del Oro, su director gerente para India, P. R. Somasundaram, ha insistido en diversas ocasiones en que este impuesto sobre la importación ha provocado que se haya creado un importante mercado negro del oro en la India y aboga por su eliminación, para poder llevar a cabo reformas más importantes.
La subida del impuesto puede desincentivar la compra de oro por parte de los ciudadanos, lo que provocaría una caída de un 10% en la demanda de oro físico, respecto a las 760 toneladas que se consumieron en 2018, según las estimaciones del All India Gems & Jewellery Domestic Council.
Esta organización, que agrupa a numerosos comerciantes y empresas, ha mostrado su rechazo a la subida. De hecho, aseguran que estaban convencidos de que el Gobierno de Narendra Modi iba a rebajar el impuesto, y advierten que van a solicitar al Ejecutivo indio que vuelva a reducirlo, para evitar el fomento del contrabando de oro.