Las importaciones de oro de la India se multiplicaron por cuatro en el pasado mes de abril, hasta las 98,3 toneladas, con respecto a las 22,2 que se habían registrado en el mismo mes del pasado año, según datos provisionales del Ministerio de Finanzas.
Las cifras de 2016 se vieron afectadas por la huelga convocada por los comerciantes de joyería, que protestaban por el impuesto sobre el consumo que gravaba las joyas fabricadas y vendidas en la India.
La demanda se ha recuperado después de que regresara la liquidez a los bolsillos de los ciudadanos, tras las medidas que aplicó a finales de 2016 el Gobierno de Narendra Modi (en la imagen) para combatir el blanqueo de capitales, unas medidas que ya se conocen como “desmonetización”.
El total de compras anuales se estima entre 650 y 750 toneladas para el conjunto del año 2017, según el último informe del Consejo Mundial del Oro.
Las ventas se han disparado durante la festividad de Akshaya Tritiya, a finales del pasado mes de abril, que fueron un 30% superiores a las registradas un año antes.
A ello ha contribuido la vuelta de la liquidez a los clientes y la moderación de los precios del oro, que ha permitido que se disparen las compras.
Al mismo tiempo, las medidas adoptadas por el Gobierno contra el blanqueo de capitales están empezando a dejarse notar: las transacciones en metálico se han reducido desde el 80% al 50% en muchas ciudades, ya que cada vez más clientes prefieren pagar con tarjeta de crédito, lo que constituye un signo positivo para el comercio.
Según afirmó P. R. Somasundaram, director gerente del Consejo Mundial del Oro en la India, la demanda de oro va a continuar creciendo gracias a las compras de los inversores, atraídos por la bajada de precios, la necesidad de los joyeros de reaprovisionarse y las previsiones meteorológicas sobre la temporada del monzón (una cuestión que afecta a la economía de las zonas rurales de la India).
En sentido contrario van a operar la entrada en vigor de nuevos impuestos sobre bienes y servicios, a partir de este mes de julio, que pueden interrumpir esta tendencia al crecimiento de la demanda.
En el ejercicio financiero que concluyó el pasado 31 de marzo, las importaciones cayeron un 20%, hasta las 716,4 toneladas. Los ciudadanos suelen comprar oro con motivo de las festividades hindúes y en la temporada de bodas, como regalos y como parte de la dote de la esposa. El país importa la práctica totalidad del oro que consume.
