El segundo mayor consumidor mundial de oro, la India, podría dejar de importar oro refinado en el plazo de entre tres y cinco años gracias al funcionamiento de sus refinerías locales, que podrían atender la demanda total del país.
Se calcula que la India consume anualmente entre 800 y 900 toneladas de oro. A diferencia de China, el mayor consumidor mundial, que es también el mayor productor, la India apenas produce oro. Alrededor de 750 toneladas anuales tienen que ser importadas, mientras que el resto se cubre con una exigua producción local y, sobre todo, con el reciclaje.
Según explican desde el diario local Business Standard, el oro refinado en el propio país está cobrando cada vez mayor importancia, hasta el punto de que especialistas como Rajesh Khoshla, presidente emérito de MMTC-PAMP, la refinería más importante del país, augura que “la India dejará de importar en el plazo de cinco años”, gracias a que las refinerías domésticas serán capaces de satisfacer la demanda del país.
La producción va a consistir en oro refinado a partir de lingotes de doré (lingotes de aleación de oro y plata, que suelen ser el producto que las minas envían a las refinerías), metal reciclado, oro movilizado por medio de los planes de monetización del Gobierno indio y metal procedente de la minería local (entre 100 y 150 toneladas). Todo esto permitirá acabar con la necesidad de importar oro refinado desde el exterior.
Durante 2018, la India importó un total de 479 toneladas de oro refinado, según los datos del Consejo Mundial del Oro. En esta cantidad se incluía también el oro importado para ser posteriormente exportado.
Por su parte, el oro refinado en la India a partir del doré importado se elevó a 275 toneladas, mientras que se obtuvieron 87 toneladas de oro reciclado y 8,6 toneladas más de la minería local y otras fuentes.
Según los cálculos de los expertos, si no se considera el oro importado para luego ser exportado, el 50% de la demanda doméstica se cubrió con oro refinado en el propio país, en su mayoría a partir de doré.
En opinión de Khoshla, esta cantidad puede crecer gracias a la nueva política gubernamental de apoyar la minería de oro local, que podría salir adelante a finales de este año. El objetivo sería alcanzar una producción anual de entre 100 y 150 toneladas de oro.
Por otro lado, el Gobierno de Narendra Modi sigue trabajando en la recuperación del oro inmovilizado en manos de los ciudadanos y los templos del país, por medio de sus planes de monetización, que se van a acelerar entre los próximos tres a cinco años.
De esta forma, tan solo se importaría el oro utilizado para reexportar, ya que tan solo el oro certificado por la London Bullion Market Association (LBMA) es aceptado en el mercado internacional, y la India tan solo cuenta con una refinería que disponga de esta certificación.
Se espera que, en los próximos dos años, otras tres refinerías indias obtengan la certificación de la LBMA.
También se espera que la popularización del oro digital y de los bonos soberanos reduzca la demanda de oro físico de inversión, que el año pasado se elevó a 160 toneladas. Una reducción que permitirá disminuir también las importaciones de metal refinado.
Suben las importaciones
De momento, la cifra de oro importado por la India sigue creciendo, a la espera de que se apliquen los proyectos mencionados. Según las cifras del Consejo de Promoción de las Exportaciones de Gemas y Joyería (GJEPC, por sus siglas en inglés), en los 11 primeros meses del último año fiscal (abril de 2018-febrero de 2019), experimentando una deceleración en el mes de febrero.
En efecto, solo en febrero pasado la India importó oro por valor de 583,2 millones de dólares, un 6% menos que en el mismo mes del año pasado. En los 11 meses comprendidos entre abril de 2018 y febrero pasado, el valor de las importaciones de oro por parte de la India fue de 7.183,02 millones de dólares, un 41,8% más que en el mismo periodo del año pasado.
Por otro lado, las importaciones de joyas de oro se elevaron a 19,92 millones de dólares en febrero y 270,65 millones entre abril y febrero pasados.
En el caso de la plata, las importaciones de lingotes fueron más modestas, por valor de 1,88 millones de dólares en febrero, un 24% menos que en el mismo mes de 2018. También cayeron las importaciones de joyas de plata, desde los 4,7 millones de dólares de febrero del año pasado a 3,88 millones el mes pasado.