La cifra de importaciones de oro de la India, el segundo mayor consumidor mundial de este metal, se redujeron a la mitad en marzo pasado, 52,5 toneladas, con respecto a las registradas en el mismo mes de 2017, según los datos de la consultora en metales preciosos GFMS.
Esta caída en las compras realizadas desde la India podría afectar al precio mundial del oro, que ha subido un 8% desde mediados de diciembre pasado y registró, a principios de diciembre, su nivel máximo de los últimos 17 meses.
Según GFMS, esta caída de la cifra de importaciones no es necesariamente una mala noticia económica para el país, ya que le permite reducir su déficit comercial, que había caído a su nivel más bajo de los últimos cinco meses el pasado mes de febrero.
Entre los principales factores que han determinado esta caída se encuentran la subida de precio del metal en la divisa local y la reducción de la demanda en las zonas rurales, que habitualmente acaparan dos tercios de la demanda total.
Los ciudadanos de las zonas rurales de la India suelen adquirir joyas de oro con los excedentes monetarios de sus cosechas y las utilizan como medio de mantener su poder adquisitivo e incluso como seguro para hacer frente a imprevistos.
El hecho de que la última temporada de lluvias monzónicas no haya sido todo lo buena que cabía esperar ha influido negativamente en las cosechas obtenidas y, por lo tanto, en el dinero disponible para invertir en oro, por lo que la cifra de demanda se ha resentido.
Por otro lado, el precio del oro en moneda local creció hasta su nivel máximo de los últimos 16 meses el pasado mes de marzo, impulsado por la subida en el mercado mundial y por la depreciación de la rupia.
La India había importado 103,7 toneladas de oro en marzo del pasado año. En el primer trimestre de 2018, la cifra se había reducido un 32% respecto a la de 2017, hasta las 163,1 toneladas, según los datos de GFMS.
En abril, se espera que las cifras mejoren, ya que las reservas de los joyeros se han reducido durante los últimos tres meses, en los que las importaciones han sido más bajas. A este aumento de la demanda va a contribuir también el inicio de la época de bodas y la festividad de Akshaya Tritiya, en las que es tradicional y se considera de buen augurio regalar oro.
Además, el oro constituye una parte esencial de la dote de las novias en la India y suele ser el regalo habitual en las bodas por parte de familiares e invitados. Por ello, los representantes del sector consideran que la demanda crecerá si los precios permanecen estables, ya que muchos clientes que habían pospuesto sus compras por la subida de precios se animarán ahora a realizarlas.