La India es el segundo mayor consumidor mundial de oro, con una demanda anual que se acerca a las 900 toneladas. Sin embargo, a diferencia de China, que es el primer consumidor, pero también el primer productor mundial de oro, India apenas tiene producción local, por lo que las importaciones de este metal representan un importante impacto en su balanza comercial.
En la reciente XI Cumbre Internacional del Oro, celebrada en ese país, el director gerente de la compañía australiana Galaxy Gold Mines, Nick Spencer, sostuvo que la India tiene capacidad para llegar a producir hasta 100 toneladas anuales de oro, lo que permitiría reducir las importaciones de metal necesarias para satisfacer la demanda interna.
Actualmente, el país apenas produce entre 1 y 1,5 toneladas anuales de oro, procedentes de una sola explotación. Esto genera un importante déficit comercial, ya que se ve obligada a importar anualmente alrededor de 900 toneladas.
En opinión de Spencer, la India tiene capacidad suficiente para incrementar la producción anual de oro hasta las 100-200 toneladas, procedentes de hasta 20 explotaciones diferentes.
Para ello, sería necesaria una inversión de entre 1.000 y 1.500 millones de dólares y se crearía empleo para entre 50.000 y 100.000 personas.
Desde el Consejo Mundial del Oro ya han advertido al Gobierno de Narendra Modi que no sería buena idea la imposición de nuevos aranceles u otras restricciones a la importación de oro, dentro de las medidas aprobadas para impulsar a la divisa local, la rupia.
El Gobierno indio quiere imponer estas restricciones para eliminar las importaciones innecesarias y evitar que un importante flujo de dólares salga de su economía en dirección a los países exportadores de oro.
Para Somasundaram PR, director gerente del Consejo Mundial del Oro, la demanda actual de oro en la India es un 7% inferior a la del año pasado, por lo que el oro no está en el centro del debate sobre el déficit comercial.
