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La inflación dispara el coste medio global de extraer oro a su máximo desde 2013

Mina de oro de Polyus (Rusia)

El coste medio global de extraer oro creció en el tercer trimestre del año hasta los 1.123 dólares la onza, un 3,6% más que el trimestre anterior y la cifra más alta desde el año 2013. Una subida que los expertos atribuyen a la subida de la inflación.

Un reciente informe de la consultora británica Metals Focus revela que el coste ‘todo incluido’ (AISC, por sus siglas en inglés) de la extracción de oro promedió los 1.123 dólares la onza en el tercer trimestre de 2021, un 3,6% más que en el trimestre anterior y la cifra más elevada desde 2013.

Según el informe, el grado medio de concentración del mineral se incrementó un 0,5% respecto al segundo trimestre de 2021 lo que, unido al debilitamiento de las divisas de los países productores con respecto al dólar, permitió reducir los costes operacionales.

Sin embargo, estos factores no fueron capaces de contrarrestar el impacto sobre los costes locales de la subida de la inflación en el tercer trimestre del año, lo que impulsó la media global de los costes totales en efectivo (TCC, por sus siglas en inglés) un 5,3%, hasta los 825 dólares la onza, el dato más alto computado por Metals Focus desde 2012.

Ha sido esta subida de los costes en efectivo la que ha propiciado el crecimiento del coste AISC, que incluye todos los conceptos relacionados con la producción del mineral, incluyendo la financiación.

Como apuntan los analistas de Metals Focus, los costes en efectivo se han visto severamente afectados por la subida de la inflación durante el tercer trimestre del año. Así, las restricciones y problemas derivados de la pandemia de covid-19 han provocado la subida de los costes salariales.

A ello hay que añadir el encarecimiento del combustible: el precio del petróleo Brent subió un 7,4% entre el segundo y el tercer trimestre de 2021, lo que ha provocado una subida del diésel que consumen la mayoría de vehículos y maquinaria que opera en las minas de oro.

La inflación también ha encarecido el coste del equipamiento, piezas y repuestos, debido a los problemas en la cadena de suministros y a la subida del precio de las materias primas utilizadas en su fabricación.

En general, los costes han crecido en los principales países productores, aunque existen algunas diferencias entre ellos.

Así, en Australia, el coste ‘todo incluido’ medio subió un 13,1% en el tercer trimestre, hasta los 1.095 dólares la onza. La mejora del grado de concentración del mineral (un 5,5% respecto al trimestre anterior) y el debilitamiento de la divisa local en la segunda mitad del trimestre acabaron reduciendo los costes operativos.

Sin embargo, esto no fue suficiente para compensar la subida de la inflación local, lo que condujo a un aumento del 21,1% en el coste total en efectivo, hasta los 840 dólares la onza.

Se trata del cuarto incremento trimestral consecutivo de este coste, cuyo impacto se ha transmitido a los costes operativos de la industria.

Por su parte, en Canadá se produjo un incremento mínimo en el coste ‘todo incluido’: apenas un 0,5%, hasta los 1.144 dólares la onza, durante el tercer trimestre del año, provocado por el aumento del 1,6% en el coste medio en efectivo, hasta los 818 dólares la onza.

La caída del 5% en el grado de concentración del mineral respecto al trimestre anterior y el aumento de la inflación se vieron mitigados por la apreciación del dólar canadiense durante la primera mitad del tercer trimestre.

Varias compañías mineras canadienses hicieron referencia en sus presentaciones de resultados a la subida de costes. Así, desde Agnico Eagle Mines subrayaron la subida del combustible diésel, que se encareció un 20% desde el mes de agosto.

También indicaron que esperan que los precios de los reactivos y consumibles se incrementen entre un 5 y un 7% durante el año 2022.

Por último, en Rusia, el coste AISC medio creció un 5,8% entre el segundo y el tercer trimestre, impulsado por un 11,9% de subida del coste medio en efectivo.

Junto a ello, el crecimiento de la inflación local, además de la significativa caída del 21% en el grado de concentración respecto al segundo trimestre, impulsaron el coste medio en efectivo a los 541 dólares la onza, su nivel más alto desde 2015.

La principal compañía minera de oro de Rusia, Polyus, atribuyó la subida de sus costes de extracción en el tercer trimestre al impacto de la inflación en los precios de los consumibles y del diésel, y a los mayores costes laborales.

Según el informe, un cierto número de operaciones y proyectos se encuentran sometidos a revisión estratégica debido a este incremento de los costes. Si la inflación sigue estando en niveles altos y los márgenes disminuyen aún más, es probable que la aprobación de proyectos en fase de desarrollo se retrase e incluso que las compañías más pequeñas tengan problemas para sobrevivir.

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