La invasión de territorio ucraniano por parte del ejército ruso ha añadido incertidumbre al escenario económico mundial. Según algunos analistas, esta situación podría ralentizar el ritmo de subidas de tipos de interés previstas por la Reserva Federal estadounidense, aunque no impedirá que éstas se lleven a cabo.
Algunos analistas han señalado que, aunque el conflicto en Europa del este está generando una enorme incertidumbre geopolítica, la mayor amenaza para la economía global sigue siendo la subida de la inflación, una cuestión que deben afrontar los bancos centrales de todo el mundo.
Según Kitco News, las tensiones geopolíticas se enfriaron ligeramente a última hora de la tarde del jueves, 24 de febrero, después de que el presidente estadounidense Joe Biden anunciara nuevas sanciones contra Rusia y asegurara que EEUU no va a enviar tropas Ucrania.
Además, entre las nuevas sanciones no se encuentra ninguna relacionada con el mercado de petróleo ni con el papel de Rusia en SWIFT, la organización que controla la red internacional de comunicaciones financieras entre bancos y otras entidades financieras.
En opinión de Colin Cieszynski, analista de SIA Wealth Management, a pesar del actual panorama geopolítico, la Reserva Federal estadounidense no puede permitirse mantener los actuales tipos de interés: “la Fed se encuentra tan retrasada con respecto a la curva de inflación que, independientemente de lo que suceda en Ucrania, tiene que subir los tipos de interés”.
Para Thorsten Polleit, economista jefe de Degussa, si la Reserva Federal no hace nada, podría provocar que la inflación se descontrolara. Sin embargo, Polleit cree que en realidad, el objetivo de la Fed no es controlar la inflación, sino simplemente aparentar que lo está haciendo, por medio de subidas de tipos “de naturaleza cosmética”.
“La Fed va a tener que hacer algo, pero no tienen intención de enfrentarse a la inflación. Si suben de forma agresiva los tipos de interés e impulsan los tipos reales a territorio positivo, provocarán el desplome de los mercados de crédito. Y eso perjudicaría de forma significativa al mercado de papel moneda”, asegura.
Según un reciente informe de Win Thin, responsable de estrategia monetaria global de Brown Brothers Harriman, la invasión de Ucrania por parte de Rusia va a complicar aún más la política monetaria. Aunque no descarta una primera subida de tipos de interés en marzo, las expectativas del mercado sobre una subida de 50 puntos básicos en la próxima reunión de la Fed han caído hasta el 20%.
“El mercado había asumido subidas de tipos de entre 150 y 175 puntos básicos durante los próximos 12 meses, pero las expectativas están reduciéndose”, afirma.
Desde Capital Economics, por su parte, creen bastante improbable que la Reserva Federal suba los tipos en 50 puntos básicos en marzo, aunque asumen que el banco central estadounidense tiene que endurecer su política monetaria, ya que las perspectivas de subida de la inflación durante los próximos meses se van a mantener, independientemente de lo que ocurra en Ucrania.
Respecto al precio del oro, los analistas pronostican altibajos, ya que el impulso de los inversores hacia el metal precioso como refugio empieza a desvanecerse mientras éstos se vuelven a centrar en la subida de los tipos de interés.
El mercado del oro experimentó un importante retroceso después de que el presidente estadounidense Jose Biden hiciese un llamamiento a la calma y de que el nuevo conjunto de sanciones contra intereses rusos fuera considerado como decepcionante. Ello propició que el oro se dejase buena parte de las ganancias que había obtenido cuando comenzó la invasión de territorio ucraniano por parte de las tropas rusas.
En estos momentos, el precio spot del oro es de 1.909 dólares la onza, mientras que el fixing de la London Bullion Market Association (LBMA) cerró la última sesión a 1.936,30 dólares la onza. Por su parte, los contratos de futuros de oro con entrega en abril cotizaban a 1.884 dólares la onza, tras haber caído un 1,38% durante la sesión.
En cuanto al resto de metales preciosos, la plata cotiza a 24,19 dólares la onza; el platino, a 1.050 dólares; y el paladio, a 2.475.