La epidemia de coronavirus se ha globalizado y, mientras países como Italia y España sufren sus peores efectos, otros se preparan para su llegada. El sector de la minería del oro no es una excepción y las compañías han adoptado diversos planes al respecto.
En un comunicado enviado a los medios de comunicación, la segunda minera mundial en términos de producción, la canadiense Barrick Gold, ha anunciado el establecimiento de planes de emergencia en todas sus operaciones y oficinas repartidas por el mundo.
Según este comunicado, Barrick ha suspendido todos los viajes de negocios no esenciales y ha limitado la continuación de los proyectos no críticos. Además, la minera ha anunciado la adopción de medidas para apoyar la sostenibilidad del negocio, aumentando la existencia de suministros y equipos clave a un mínimo de tres meses, identificando proveedores y rutas de envío alternativos e implementando los planes de contingencia para la limpieza y descarga.
Newmont
Por su parte, la estadounidense Newmont Goldcorp ha anunciado la creación de un grupo de trabajo dedicado a asegurar la cadena de suministros a escala global. Este grupo se encargará de estudiar los riesgos potenciales y desarrollar planes de contingencia que les permitan sobreponerse a las posibles interrupciones de suministro que puedan poner en riesgo sus proyectos y la producción.
Entre las minas que se han visto seriamente afectada por las restricciones impuestas por los gobiernos nacionales está la de Yanacocha (Perú). Las operaciones de extracción han sido limitadas y solo se va a producir oro desde los depósitos de lixiviación.
También seguirán llevándose a cabo otras operaciones relacionadas con la seguridad y el impacto medioambiental de la explotación. La mina de Yanacocha aporta alrededor del 3% de la producción de oro de Newmont Goldcorp.
Desde la compañía no se atreven a dar estimaciones del impacto que puede tener en su producción este cierre parcial, ni el de las minas de Musselwhite y Eleanore (Canadá) y Cerro Negro (Argentina).
Además, el CEO de la minera, Tom Palmer, ha asegurado que “aunque en estos momentos no tenemos casos confirmados de Covid-19 en nuestra plantilla ni se han producido interrupciones en la producción de nuestras explotaciones, estamos tomando medidas de forma proactiva para proteger a nuestra gente y garantizar la continuidad del negocio durante esta pandemia global”.
La compañía ha retirado sus estimaciones de producción para 2020 y asegura que cuenta con un colchón de liquidez de más de 5.000 millones de dólares.
AngloGold
La tercera mayor minera de oro del mundo, la sudafricana AngloGold Ashanti también ha elaborado planes de emergencia y ha creado un grupo de trabajo para hacer frente a la pandemia.
Entre las medidas adoptadas para garantizar la continuidad del negocio están el establecimiento de planes de alerta en todas sus instalaciones; la identificación de las zonas de riesgo de cara a los suministros; y la acumulación de mayores stocks de diferentes proveedores para casos de necesidad.
Otras compañías mineras también se han visto obligadas a suspender las operaciones. Es el caso de Lundin Gold, que ha cerrado temporalmente su mina de Fruta del Norte (Ecuador), para reducir el riesgo de contagio entre sus empleados y las comunidades locales.
Según ha informado Lundin, la compañía mantendrá una plantilla reducida en la mina para realizar trabajos de mantenimiento que minimicen los efectos del cierre.
La minera señala que no puede indicar la duración del cierre, ya que todo depende de las decisiones de las autoridades locales y nacionales.
Efectos en el suministro
La pandemia de coronavirus va a provocar una importante reducción del suministro de oro a finales de año. Según los analistas, el aumento de la demanda de oro como refugio ya está provocando un desabastecimiento de oro físico, situación que podría verse agravada en los próximos meses con la reducción del suministro procedente de la minería.
Una situación que obligará a echar mano de los stocks acumulados e incrementar la producción procedente del reciclaje y que, en último caso, contribuirá al alza del precio del metal.
Cierre total en Sudáfrica
Pero el país que ha adoptado las mayores restricciones en el sector minero ha sido Sudáfrica, cuyo presidente, Cyril Ramaphosa, ha ordenado el cierre de todas las minas del país, a excepción de lagunas de carbón para mantener el suministro energético, desde la medianoche del 26 de marzo hasta el 16 de abril.
Se trata de una medida sin precedentes en los 150 años de historia de la minería en el país, que va a afectar a más de 450.000 trabajadores.
Las minas se mantendrán con trabajos de mantenimiento y conservación hasta que sean autorizadas a reanudar su actividad.
Según Roger Baxter, CEO del Consejo de Minería de Sudáfrica, «se trata de una medida sin precedentes en la historia de la minería. En algún momento se cerró una parte de la industria, como en la Segunda Guerra Mundial, pero un cierre como éste no se ha hecho nunca».
El impacto del cierre va a ser muy significativo en los mercados del platino y el paladio; hay que recordar que Sudáfrica produce el 75% del platino y el 38% del paladio que se extrae anualmente en el mundo.