En 2017 la Monnaie de Paris (Casa de la Moneda de Francia, Ceca de Paris) inició la emisión de una serie de monedas, acuñadas en oro y en plata, con la imagen icónica de la Marianne francesa obra del grabador jefe Joaquín Jiménez, dedicada anualmente a uno de los tres lemas de la República Francesa: Liberté, Égalité, Fraternité.
Ahora, desde el 22 de enero, cierra el turno de los tres lemas revolucionarios la “Fraternité”, plasmado sobre sobre la cara de una moderna, pero siempre icónica, Marianne, obra del actual director del Departamento de Grabado de la Monnaie de Paris, Joaquín Jiménez.
La emisión en oro de la moderna Marianne, presentada por la Ceca parisina como moneda de colección e inversión, ha sido acuñada en metal amarillo de 999 milésimas, oro puro, con un peso de 3,750 gramos para su valor nominal de 250 euros. La tirada será de tan solo 15.000 ejemplares, calidad BU (Brillante Sin circular) y diámetro de 23 milímetros.
En el anverso, obra de Joaquín Jiménez, encontramos a una Marianne estilizada, con una imagen de forma contemporánea. Representada en tres cuartas partes, lleva un gorro frigio con escarapela a la derecha y la cabeza está rodeada por una corona de roble y olivo que se refiere a la fuerza y solidez por un lado, la paz, la victoria y la fertilidad. de otro. La Fraternidad está simbolizada por la primera letra «F», que se transforma en signos de mano estampados. La fraternidad entre las personas es un elemento fundamental de la República Francesa.
El reverso de la moneda muestra el valor facial, en este caso 250 euros, rodeado por dos ramas, una de roble y la otra de laurel, que evocan el acrónimo del euro. Todo el motivo del reverso está enmarcado por un conjunto de líneas que representan un hexágono.