La distorsión que ha introducido el Covid-19 en la industria del oro ha afectado a la práctica totalidad de los actores del sector. Si las mineras tienen el reto de volver a poner en marcha las explotaciones cerradas y lograr que la caída de la producción sea mínima a final de año, refinerías y casas de la moneda están preocupadas por el suministro de oro. Desde la Perth Mint han tomado medidas y se han lanzado a una campaña de fomento del reciclaje.
Todo apunta a que el cierre temporal de minas de oro por las restricciones obligadas por el Covid-19 va a provocar una caída interanual de la producción de metal a final de año. La magnitud de esta caída dependerá de la capacidad de reacción que tengan las compañías mineras para volver a poner en marcha sus explotaciones y de que las medidas de prevención de contagios no interfieran en el trabajo diario de las minas más grandes.
En cualquier caso, el sector ya se está preparando para ello. Un ejemplo es la iniciativa de la Perth Mint australiana. La Casa de la Moneda de Perth, que acuña bullion tan populares como el Canguro o el Koala, acaba de publicar en su blog dedicado a los coleccionistas de monedas un post titulado Top tips for selling gold, algo así como “Los mejores consejos para vender oro” (ver imagen).
Como explican desde el blog, “ahora que el precio del oro se acerca a sus niveles récord en dólares australianos, quienes tengan joyas antiguas de oro o monedas o lingotes de los que quieran deshacerse, tienen la oportunidad de ganar una pequeña fortuna. Sin embargo, antes de hacer caja, es importante que se den cuenta de en quién pueden confiar y cuál es el precio justo por su oro”.
Sin duda, unas palabras que habrán puesto en alerta a más de uno. Ante la situación económica que se presenta, con una crisis que puede ser más devastadora que la de 2008, muchas economías domésticas se pueden salvar gracias a la venta de los ahorros familiares en forma de oro, ya sean joyas o lingotes y monedas.
El post del blog de la Perth Mint continúa ofreciendo una serie de consejos a los posibles vendedores: “el precio del oro está en constante movimiento en los mercados internacionales. El precio que sale en los resúmenes nocturnos suele ser solo indicativo, por lo que es aconsejable buscar en la web la cifra más actualizada. Además, hay que darse cuenta de que la tasa conocida como ‘precio spot’ no es el precio que usted va a recibir por su oro, ya que los compradores suelen ofrecer un precio inferior para compensar los costes de sus negocios”.
A continuación, el post explica la pureza que suelen tener las piezas de joyería y advierte de que la cantidad de oro vendida en realidad puede ser bastante inferior a lo que el cliente cree.
Pero la sorpresa llega al final del artículo, en un apartado titulado “Avoid the scammers!” (“¡Cuidado con los estafadores!”), que comienza alertando a los posibles clientes de las estafas relacionadas con la venta de oro: “por favor, no se deje engañar por comerciantes sin escrúpulos que están dispuestos a aprovecharse de los consumidores poco informados”.
Como se desvela a continuación, el post constituye un anuncio publicitario en el que la propia Perth Mint promociona su servicio de compra de joyas y piezas de oro a los clientes interesados en deshacerse de ellas: “a diferencia de otros compradores de oro que abren su negocio y desaparecen sin dejar rastro, la Perth Mint lleva funcionando casi 121 años. Somos propiedad del Gobierno y estamos especializados en metales preciosos, con operaciones de refinado, acuñación y fabricación de monedas y lingotes, inversión, venta al por menor y recompra. Cumpliendo con la ley de Australia Occidental, contamos con una licencia de comerciantes de segunda mano, con el número 1.824”.
El post termina con una serie de enlaces que conducen a la web de compra de oro de la propia Perth Mint y al precio spot actualizado.
Una maniobra de márketing bien organizada, que pone de relieve la preocupación que existe en el sector ante una posible caída de la producción procedente de la minería, que haría imposible atender a la creciente demanda de oro físico por parte de los inversores de todo el mundo.
De hecho, como publicamos en su momento en Oroinformación, la propia Perth Mint se ha visto obligada durante los últimos meses a aumentar la producción de lingotes de oro de un kilo para abastecer la demanda del mercado COMEX de Nueva York, desbordado por la venta de contratos de oro que necesitaban respaldar con oro físico.