La plata puede protagonizar una importante revalorización durante este año 2023. Según los analistas, el coste de este metal podría alcanzar este año un precio de 30 dólares la onza, que sería el máximo de los últimos nueve años y le permitiría superar la revalorización del oro.
La última vez que el precio de la plata superó la barrera de los 30 dólares la onza fue en el mes de febrero de 2013, según datos de Refinitiv.
Como señalan desde Techstory, la razón de esta previsión de aumento del precio está en la escasez de suministros de plata y a su tendencia a comportarse mejor que el oro durante los periodos de alta inflación. En el pasado, la plata ha mostrado ganancias de casi el 20% cada año durante periodos de alta inflación.
Los analistas creen que, dado que la plata sigue siendo relativamente barata en comparación con el oro, no sería de extrañar que alcanzara los 30 dólares la onza este año, aunque esto podría plantear cierta resistencia.
Históricamente, la plata alcanzó su precio al contado más alto de todos los tiempos, 49,45 dólares la onza, en 1980, durante una época de inflación del 13,5%. Actualmente, la plata cotiza a 24,02 dólares la onza, con una tasa de inflación del 6,5%.
En 2023, los precios de la plata podrían alcanzar un máximo de nueve años, superando el precio del oro. Varios factores están contribuyendo a la posible subida de los precios de la plata, entre ellos el aumento de la demanda de plata en diversas aplicaciones industriales, así como un creciente interés en los metales preciosos como cobertura contra la inflación.
Entre los factores que impulsan la demanda de plata está su uso en diversas aplicaciones de alta tecnología, como la electrónica y los paneles solares. Se espera que el crecimiento de estas industrias aumente la demanda de plata en los próximos años, lo que podría provocar una subida de su precio.
The Silver Institute informó de que la oferta de plata producida por las minas en 2022 fue de 843,2 millones de onzas, por debajo de la cantidad más alta de la década, 900 millones de onzas en 2016.
Además de sus usos industriales, la plata también podría beneficiarse del creciente interés en los metales preciosos como cobertura contra la inflación. Dado que los bancos centrales de todo el mundo siguen inyectando liquidez en sus economías, muchos inversores están preocupados por la posibilidad de que aumente la inflación en el futuro. En consecuencia, recurren a los metales preciosos como activo refugio.
La oferta de plata, que se obtiene principalmente como subproducto de las minas de cobre, plomo-zinc y oro, no reacciona con rapidez a los cambios en la demanda, ya que las minas primarias de plata solo representan el 25% de la oferta del metal.
