Rusia mantuvo en 2017 la tercera posición entre los mayores productores de oro del mundo, con 272 toneladas, un 7,6% más que el año anterior. Para el presente año 2018, se espera que la producción de oro del país continúe en aumento.
Según el informe Precious Metals Weekly, de la consultora especializada en metales preciosos Metals Focus, entre las claves de este aumento se encuentran el crecimiento de la producción en las minas de Verninskoye y Olimpiada. A ello hay que añadir la entrada en funcionamiento de la mina de Bystinsky, propiedad de Norilsk Nickel, a finales del primer semestre de 2018, así como el aumento previsto de la producción en la mina de Natalka, lo que va a permitir que la producción del país a cierre del presente año registre un nuevo crecimiento.
Rusia contribuyó con un 84% a la producción total del oro de la llamada Comunidad de Estados Independientes (CEI), región que incluye también a Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Moldavia, Rusia, Tayikistán, Turkmenistán, Uzbekistán y Ucrania. Esta región es la que menores costes de producción de oro ha registrado en 2017.
Sus costes totales en efectivo crecieron un 2%, hasta los 464 dólares la onza, en comparación con el crecimiento del 1%, hasta los 646 dólares la onza del total global. Precisamente Rusia fue el principal causante del incremento de los costes en la región, debido al encarecimiento del rublo y al crecimiento de la inflación, que provocaron un aumento de los costes laborales.
En cuanto a la demanda, la mayor parte de la producción local de Rusia ha sido adquirida por el propio banco central del país que, desde 2014 y a raíz del incremento de las tensiones entre Rusia y Occidente, ha aumentado sus reservas de oro en más de 200 toneladas.
En lo que llevamos de año y hasta finales de marzo, las reservas de Rusia han crecido en 52 toneladas, un ritmo que, según las previsiones de Metals Focus, se va a mantener durante el resto de 2018.
Desde la consultora señalan que, desde el pasado mes de noviembre, el Banco Central de Rusia comenzó a adquirir oro en la Bolsa de Moscú, además de hacerlo directamente por medio de los bancos comerciales. Sin embargo, las transacciones realizadas a través del mercado moscovita han sido modestas, debido a que sus precios son mucho menos competitivos, además de la existencia de diversas regulaciones gubernamentales que complican las transacciones.
En cuanto al posible impacto sobre el mercado local del oro de las sanciones impuestas por Estados Unidos a diversos empresarios rusos, el sentimiento generalizado en el sector es de cautela, aunque desde Metals Focus creen que su impacto será limitado, debido a que la mayoría de la producción local será absorbida por el Banco Central de Rusia.