El pasado 13 de septiembre se inauguró en la ciudad china de Nanjing (provincia de Jiangsu) la nueva planta de procesamiento de metales preciosos de la refinería Heraeus, como parte de la estrategia de la empresa alemana para incrementar su presencia en el mayor productor y consumidor mundial de oro.
La nueva planta se ha inaugurado apenas dos años después de que Heraeus se estableciera en China, país para el que tiene prevista una inversión de 120 millones de dólares. Está destinada al procesado químico de metales preciosos y al reciclaje de los mismos, para su uso en los sectores petroquímico, automovilístico y farmacéutico.
Con una superficie total de 84.000 metros cuadrados, se trata de la planta más avanzada tecnológicamente de la empresa alemana, con un 70% de automatización de los procesos de producción.
La entrada en funcionamiento de esta planta permitirá incrementar la capacidad de reciclaje de metales preciosos por parte de Heraeus desde las 700 toneladas anuales a más de 3.000, multiplicando por tres el volumen de reciclaje de China.
Según el director ejecutivo de Heraeus, Jan Rinnert, “la planta de Nanjing nos permitirá mantenernos cerca de nuestros clientes locales y servirles mejor con nuestras capacidades globales”.
China es el mayor consumidor mundial de metales del grupo del platino, acaparando alrededor del 30% de la demanda mundial. Tanto el platino como el paladio, dos metales de este grupo, son muy utilizados por parte de la industria del automóvil para la fabricación de catalizadores para los motores diésel y de gasolina, respectivamente.