El precio del oro se encuentra ahora mismo en sus niveles mínimos del último año. Dos factores están influyendo en esta situación: la subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal y la pujanza del dólar. Sin embargo, los analistas advierten de que las complicaciones geopolíticas derivadas de la situación de la guerra en Ucrania podrían representar una seria amenaza tanto para la divisa estadounidense como para el resto de monedas de los países occidentales.
En un análisis publicado en Goldmoney, el experto en metales preciosos Alasdair Macleod señala que la situación actual de los precios del oro y la plata se produce en un entorno de gran debilidad del yen, el euro, la libra y el yuan. En cambio, como refleja el índice ponderado por el comercio del dólar, la divisa estadounidense sigue apreciándose respecto a éstas.
Como señala Macleod, “sin duda, hay muy buenas razones para salir de las otras divisas y entrar en el dólar. Pero la condición de sobrecompra del dólar debe ser extrema, lo que lo expone a repentinos y bruscos ataques bajistas. Junto con la posición de sobreventa del oro y la plata, sin duda reflejada en una serie de contratos de materias primas y energía, podemos ver cómo los operadores pueden llegar a estar muy equivocados”.
El análisis destaca también otros acontecimientos dignos de atención, especialmente la situación geopolítica en relación con Rusia, que está a punto de supervisar los referendos en las provincias de habla rusa del este de Ucrania, preguntando a los ciudadanos si quieren pasar a formar parte de Rusia. Suponiendo que estén de acuerdo, la frontera rusa avanza hacia el oeste y, en ausencia de un alto el fuego, los ucranianos apoyados por la OTAN atacarán directamente a Rusia, lo que sería una escalada hacia un conflicto directo entre este país y la OTAN.
Según el analista “probablemente, Putin espera que se produzca un incómodo alto el fuego. Mientras tanto, su atención parece estar ya volcada en los asuntos monetarios y financieros, centrados en el oro. Junto con las reservas del Banco Central de la Federación Rusa, se cree que el fondo estatal de Rusia y su Fondo Ruso de Inversión Directa, su fondo soberano, poseen unas 12.000 toneladas de oro. Se han tomado medidas para ‘movilizar’ el oro que no es de reserva. No se trata de una financiación de emergencia para la guerra, como piensan algunos comentaristas, sino más bien para poder incluirlo en las reservas del banco central. Rusia podría entonces declarar las mayores reservas de oro monetario del mundo”.
Este aumento de las reservas estratégicas de Rusia, junto con el recientemente anunciado estándar de oro de Moscú y los planes para una nueva moneda de liquidación comercial que sustituya al dólar, proporcionará apoyo a un nuevo estándar de oro para el comercio transfronterizo: sustituiría los pagos a Rusia por energía en las débiles monedas asiáticas, y probablemente obligaría a China a declarar también sus verdaderas reservas de oro.
“Si éste es el plan de Putin, las consecuencias para las monedas fiduciarias occidentales serán probablemente devastadoras: sufrirían el equivalente financiero de un ataque nuclear”, sentencia Macleod.