La predicción por parte de Citigroup Inc. de que el oro podría repuntar a más de 2.000 dólares la onza en dos años, puede ser muy positiva para el rey de los metales preciosos, pero altamente negativa para otro producto brillante y precioso: los diamantes. Eso es lo que opina Barry Ehrlich, analista del banco estadounidense.
El escenario alcista para el oro de Citigroup se basa en factores que incluyen la posibilidad de que la Reserva Federal reduzca las tasas de interés a cero, un aumento de los riesgos de una recesión mundial y el incremento de tensiones geopolíticas.
“En comparación con el oro, los diamantes son una reserva de riqueza inferior y, por lo tanto, es poco probable que se beneficien significativamente de una huida de los inversores hacia las monedas fiduciarias”, comentó Ehrlich a Bloomberg. Una economía global y estadounidense más débiles dañarían la demanda.
“Un mercado de diamantes saludable requiere un consumidor de clase media saludable en Estados Unidos (y China e India)”, señaló.
Finalmente, la historia muestra que los precios elevados del oro resultan en mayores niveles de reciclaje.
Durante el rally 2011-2012, cuando el oro alcanzó su récord actual de 1.921,17 dólares por onza, “junto con este oro reciclado también vino un mayor reciclaje de diamantes”, dijo Ehrlich.
“Si las condiciones económicas se deterioran, deberíamos esperar no solo una demanda moderada sino un suministro adicional de diamantes para el reciclaje”, concluyó el analista del Citigroup