La reunión celebrada por la Reserva Federal estadounidense a finales del pasado mes de enero sirvió para constatar un cambio en la política monetaria que había llevado a cabo esta institución durante los últimos meses. Un cambio que, según interpretan los analistas, va a beneficiar al precio del oro.
En la última edición de su informe Precious Metals Weekly, la consultora especializada en metales preciosos Metals Focus recuerda que en su reunión del pasado mes de diciembre, la Reserva Federal elevó los tipos de interés por cuarta vez en 2018 y apuntó su intención de seguir subiéndolos, a pesar de los indicios de un aumento de los riesgos.
“En especial, las bolsas se han visto presionadas desde el mes de octubre y la política monetaria relativamente agresiva de la Fed en diciembre ha contribuido a aumentar la volatilidad en los mercados”, señala el informe.
En efecto, el FTSE All World Index, que recoge los datos de una serie de mercados mundiales, registró a finales de 2018 una caída del 11%, su peor resultado desde la crisis financiera global y un gran cambio respecto al 22% de ganancia en 2017.
Respecto a lo que va a suceder en 2019, la preocupación acerca de la ralentización del crecimiento global se va a incrementar, en especial después de que el crecimiento del PIB de China haya caído a su nivel más bajo de los últimos 30 años, lastrado por el enfrentamiento comercial con los Estados Unidos.
Además, la amenaza del Brexit y el debilitamiento de la actividad en la Eurozona y algunos mercados emergentes hacen peligrar las perspectivas de crecimiento global en 2019.
Según los analistas de Metals Focus, los miembros del Comité de Mercados Abiertos de la Reserva Federal (FOMC, por sus siglas en inglés) parecieron entender los desafíos a los que se enfrenta el crecimiento global y sugirieron que su política monetaria va a ser menos agresiva en este 2019, con menos subidas de tipos que el año anterior.
También apuntaron la posibilidad de ralentizar su plan de reducción de activos, que pusieron en marcha a partir de 2017 para comenzar a reducir su balance, tras la compra de activos que se realizó durante la crisis para apoyar al sistema financiero.
El informe de Metals Focus apunta que esta política menos agresiva de parte de la Fed va a influir en el precio del oro, permitiéndole mantenerse por encima del nivel clave de los 1.300 dólares la onza. “Aunque la recuperación de los mercados de capitales será un factor en contra del oro, no parece probable que el dólar siga fortaleciéndose, lo que contribuirá a que el oro mantenga sus actuales niveles. Además, se espera que las divergencias políticas entre la Reserva Federal y el Banco Central Europeo se reduzcan para finales de este año, lo que se traducirá en una mayor debilidad del dólar y un impulso para el precio del oro en los últimos meses de 2019”, concluye el informe.