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Las compras de oro de los bancos centrales aumentaron un 152% en 2022

Los bancos centrales cerraron 2022 con unas compras netas declaradas de 28 toneladas de oro en diciembre. Incluyendo las grandes compras no declaradas, el total de compras de oro de los bancos centrales en 2022 ascendió a 1.136 toneladas. Fue el segundo nivel más alto de compras netas registrado desde 1950, y el decimotercer año consecutivo de compras netas de oro por parte de los bancos centrales.

Según explican desde ZeroHedge, China volvió a comprar oro oficialmente en noviembre y realizó otra gran compra de 30 toneladas en diciembre. Con ello, las reservas totales de oro de China superaron por primera vez las 2.000 toneladas.

El Banco Popular de China acumuló 1.448 toneladas de oro entre 2002 y 2019, y luego de repente se quedó en silencio. Muchos especulan que los chinos continuaron agregando oro a sus tenencias fuera de los libros durante esos años silenciosos.

Siempre se ha especulado que China posee mucho más oro del que revela oficialmente. Como Jim Rickards señaló en 2015, muchas personas especulan que China mantiene varios miles de toneladas de oro “fuera de los libros” en una entidad separada llamada Administración Estatal de Divisas (SAFE).

El Banco Central de la República de Turquía continuó con sus constantes compras en diciembre, añadiendo otras 25 toneladas a sus crecientes reservas de oro. En el transcurso de 2022, Turquía añadió unas 150 toneladas de oro a su atesoramiento.

Por su parte, Croacia compró dos toneladas de oro después de no haber comunicado ningún cambio en sus reservas de oro desde 2001.

Tras una pausa en noviembre, el Banco de la Reserva de la India reanudó la compra de oro en diciembre, con una modesta adquisición de una tonelada. La India es el noveno país del mundo con mayores reservas de oro. Desde que reanudó las compras a finales de 2017, el Banco de la Reserva de la India ha comprado más de 200 toneladas de oro. En agosto de 2020, hubo informes de que el Banco de la Reserva de la India estaba considerando aumentar significativamente sus reservas de oro.

Estas compras se vieron parcialmente compensadas por las grandes ventas de Kazajistán (29 toneladas) y Uzbekistán (una tonelada). No es infrecuente que los bancos que compran a la producción nacional, como Uzbekistán y Kazajistán, alternen las compras con las ventas.

Las compras de diciembre elevaron el aumento neto total de las reservas de oro de los bancos centrales en el cuarto trimestre a 417 toneladas. Hasta la segunda mitad de 2022, los bancos centrales compraron 862 toneladas de oro.

El aumento total de las reservas fue una combinación de compras declaradas, junto con una estimación de compras significativas no declaradas. Entre los bancos centrales que no suelen informar de sus compras se encuentran China y Rusia. Muchos analistas creen que China es el comprador misterioso que acumula oro para minimizar su exposición al dólar. Según el Consejo Mundial del Oro, “si se dispusiera de más información sobre esta actividad no declarada, estas estimaciones podrían revisarse”.

Las compras totales de los bancos centrales en 2022, 1.136 toneladas, representaron un aumento del 152% respecto a 2021. Fue el nivel más alto de compras anuales netas de oro de los bancos centrales desde la suspensión de la convertibilidad del dólar en oro en 1971, y el segundo total anual más alto registrado (el récord fue en 1967).

Según el Consejo Mundial del Oro, la compra de oro por parte de los bancos centrales obedece a dos motivos principales: su rendimiento en tiempos de crisis y su papel como depósito de valor a largo plazo.

No es de extrañar, pues, que en un año marcado por la incertidumbre geopolítica y la inflación galopante, los bancos centrales hayan optado por seguir añadiendo oro a sus arcas y a un ritmo acelerado».

El jefe global de investigación del Consejo Mundial del Oro, Juan Carlos Artigas, dijo a Kitco News que las grandes compras subrayan el hecho de que el oro sigue siendo un activo importante en el sistema monetario mundial.

“Aunque el oro ya no respalda a las divisas, se sigue utilizando. ¿Por qué? Porque es un activo real”, afirmó.

En todo el mundo, los bancos centrales han aumentado sus reservas netas durante 13 años consecutivos. En ese tiempo, compraron más de 6.800 toneladas de oro.

Después de años récord en 2018 y 2019, la compra de oro de los bancos centrales se desaceleró en 2020, con compras netas por un total de alrededor de 273 toneladas. El menor ritmo de compras en 2020 era de esperar dada la fortaleza de las compras de los bancos centrales tanto en 2018 como en 2019. El caos económico provocado por la pandemia de coronavirus también ha afectado al mercado.

La demanda de los bancos centrales fue de 650,3 toneladas en 2019. En ese momento, ese fue el segundo nivel más alto de compras anuales en 50 años, solo ligeramente por debajo de las compras netas de 2018 de 656,2 toneladas.

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