Después de registrar su nivel más bajo de los últimos ocho años en el mes de julio, las importaciones de oro de China a través de Hong Kong se han disparado un 61%, hasta las 12,997 toneladas.
Según los últimos datos del Departamento del Censo y Estadísticas de Hong Kong, las importaciones netas mensuales de oro de China vía Hong Kong se dispararon en agosto un 61%, después de haber caído en el mes de julio a su nivel más bajo de los últimos años.
En concreto, la cifra de importaciones netas por parte del principal consumidor mundial de oro por medio de Hong Kong se elevó a 12,997 toneladas, muy por encima de las 8,095 toneladas registradas en el mes de julio.
Las importaciones totales de oro vía Hong Kong crecieron también en agosto por vez primera desde el mes de abril, alcanzando las 15,661 toneladas, un 43,5% más que las 10,915 toneladas de abril.
Tanto las importaciones netas como totales de oro de China vía Hong Kong habían caído en el mes de julio hasta su nivel más bajo desde mayo de 2011.
Fuentes de la industria del oro local apuntan que un factor que ha contribuido a que esta magnitud vuelva a crecer es el hecho de que el Gobierno chino levantó parcialmente las restricciones sobre las importaciones de oro, suavizando las limitaciones que habían impedido la entrada de entre 300 y 500 toneladas de oro en el país desde el pasado mes de mayo.
Durante el pasado mes de agosto, China importó más oro desde Suiza y Singapur que desde Hong Kong, según los datos de Refinitiv GFMS. La mayor parte de la demanda ha procedido del sector de la inversión, lo que pone de relieve el mal momento por el que atraviesa el sector de la joyería de oro en China, que tradicionalmente ha sido la principal fuente de demanda.
Parte de la responsabilidad del mal momento de este sector la tiene la inestabilidad política que ha sacudido Hong Kong en los últimos meses, que ha retraído las ventas y ha despertado la preocupación entre los clientes por las posibles dificultades de sacar el oro de la ciudad, después de la ocupación del aeropuerto por parte de los manifestantes.
A ello se ha unido la decisión de China de incrementar la importación directa de oro, para combatir la fuga de capitales, que tiene en el oro uno de sus principales vehículos.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta que China no proporciona cifras sobre las importaciones de oro, por lo que los datos que proceden de Hong Kong simplemente son un termómetro para averiguar el estado de la demanda en el país, que cuenta también con otras vías de entrada de oro como son Shanghai y Pekín.
