El llamado sector oficial, compuesto por los bancos centrales, es el mayor acumulador de reservas de oro, con aproximadamente 33.800 toneladas en lingotes de este metal. En 2017, este sector adquirió 371,4 toneladas de oro, un 5% menos de la cifra de 2016, según el Gold Survey 2017 del Consejo Mundial del Oro. ¿Por qué este interés por acumular oro? Los propios bancos lo explican.
El colectivo conocido como sector oficial comprende tanto a los bancos centrales de los países, instituciones monetarias internacionales como el Banco de Pagos Internacionales (BIS) y autoridades monetarias nacionales. Todas estas instituciones acumulan oro entre sus reservas estratégicas, además de divisas extranjeras (principalmente dólares estadounidenses) y derechos especiales de giro del FMI. Los criterios de seguridad, liquidez y beneficios son los que presiden su gestión.
Como señala desde BullionStar, Ronan Manly, quien ha investigado los motivos que mueven a los bancos centrales a acumular reservas de oro, en la mayoría de los casos estos bancos centrales no poseen el oro, sino que meramente lo custodian en nombre de sus respectivos estados.
Entre los motivos que llevan a estos bancos a acumular oro está su condición como depósito de valor, como seguro financiero o como activo para diversificar sus inversiones. Manly contactó con las 40 primeras instituciones de la lista, para averiguar los motivos por los que acumulan oro. Éstas fueron las respuestas más destacadas:
Alemania
Desde el Bundesbank alemán, que ha culminado hace unos meses la repatriación de la mayor parte de sus reservas en oro desde Nueva York y París, destacan especialmente la alta liquidez del oro y su importante papel en las crisis financieras y emergencias. “En casos de crisis, el oro puede utilizarse como garantía o venderse en el mismo lugar donde se custodia, sin necesidad de transportarlo. Es una reserva de emergencia que puede utilizarse en situaciones de crisis, cuando las divisas están presionadas”, señalan.
Austria
El Banco Nacional de Austria también subraya la liquidez del oro, y sus beneficios en caso de crisis y como elemento diversificador: “el oro es una parte esencial en nuestra estrategia de prevención y de gestión de crisis, así como una reserva de liquidez y un medio para diversificar nuestras inversiones”.
Polonia
Por su parte, el Banco Central de Polonia destacó las principales características del oro que lo hacen idóneo para formar parte de las reservas: “carencia de riesgo crediticio, independencia respecto a la política económica de los países, tamaño reducido y características físicas como la durabilidad y la casi indestructibilidad”.
Además, destacan que el oro se ha considerado tradicionalmente como un activo refugio, especialmente indicado para tiempos de crisis, cuando el precio del oro se incrementa mientras cae el del resto de activos.
Suecia
El Riksbank sueco, el banco central más antiguo del mundo, explica que “el oro es un activo financiero que, como las reservas en divisas, sirve para asegurarse de que el Riksbank puede llevar a cabo sus tareas. El oro, por ejemplo, puede usarse para inyectar liquidez o en intervenciones en divisas extranjeras. La principal razón por la que Suecia todavía cuenta con reservas en oro es porque el valor del oro no sigue habitualmente el mismo patrón que el valor de las reservas en divisas. Por ello, el valor combinado de las reservas en oro y en divisas es más estable que el valor de ambos activos por separado”.
Grecia
El Banco de Grecia argumenta que “las dos principales razones por las que entidades de una gestión tan prudente como los bancos centrales eligen invertir en oro como activo de reserva en sus balances son: su reconocimiento como un activo refugio durante periodos de inestabilidad de los mercados y su capacidad para ofrecer liquidez inmediata en casos de emergencia”.
Reino Unido
Desde el Reino Unido, el Banco de Inglaterra aclara que actúa como custodio de las reservas de oro del Tesoro de Su Majestad, así como del oro de muchos de los bancos centrales del mundo.
Entre los argumentos que destaca el Banco de Inglaterra sobre el papel del oro, está el del llamado “cofre de guerra”: el oro es el activo definitivo que hay que poseer en caso de emergencia y en el pasado se ha apreciado su valor en tiempos de inestabilidad o incertidumbre financiera.
Además, el oro es un depósito de valor, una protección frente a la inflación y un medio de cambio que ha mantenido su valor frente a la inflación y siempre es aceptado como medio de pago entre los países.
Por otro lado, el Banco de Inglaterra destaca que el oro no es una obligación de nadie, por lo que no puede ser congelado, rechazado o impagado, así como el papel que históricamente ha desempeñado en el sistema monetario internacional como respaldo del papel moneda doméstico.
Filipinas
El Banco Central de Filipinas explica que acumula oro en sus reservas por cuatro motivos: como elemento diversificador de sus activos; por seguridad, ya que es un activo real que no tiene contraparte ni riesgo de crédito; y como protección frente a la inflación.
Además, dado que Filipinas es un país productor de oro, el Banco Central puede comprar metal a los pequeños mineros, refinarlo y fundirlo, para añadirlo a sus reservas sin tener que realizar compras externas que tendrían que pagarse en divisas.
Sudáfrica
Una de las respuestas más completas fue la ofrecida por el Banco de la Reserva de Sudáfrica, quien se define como “un poseedor tradicional de oro, que ha heredado sus reservas de oro como parte de un legado y ha mantenido intacto su nivel para apoyar los planes del país. Dado que Sudáfrica es uno de los mayores productores de oro del mundo, parece apropiado que el Banco de la Reserva acumule parte de sus reservas en oro para confirmar la confianza del país en este metal”.
Además, desde el banco sudafricano destacan otras razones para acumular oro en sus reservas, similares a las expresadas por otros bancos centrales: como depósito de valor en tiempos de crisis y refugio del capital; como protección frente a la inflación; como elemento diversificador de las reservas oficiales; por su valor intrínseco y por no ser una obligación de nadie; y como elemento asegurador frente a eventos como el colapso de los sistemas financieros.
España
Un buen número de organismos ofrecieron como respuesta referencias a informes o documentos que poco o nada tenían que ver con la pregunta realizada desde BullionStar o, directamente, se negaron a responder. Es el caso del Banco de España, “un organismo particularmente celoso del secretismo en torno a sus reservas de oro”, como apunta Ronan Manly, y cuya respuesta textual fue la siguiente: “no hacemos comentarios públicos sobre la política de activos de reserva del Banco de España, así que desafortunadamente no podemos ayudarle en su investigación”.
Resulta muy llamativo que otros bancos centrales de países de la Eurozona, como Alemania, Austria, Portugal o Grecia no hayan tenido ningún problema para responder a una pregunta que, más que revelar datos confidenciales o sensibles respecto a la política monetaria del país, requería una respuesta teórica y didáctica. Una ocasión perdida para dar a conocer al público la labor del banco y, de paso, alejarse de la imagen de secretismo que desprende.