Los precios del oro y de la plata han caído en estos días, después de que algunos datos relativos a la economía estadounidense, mejores de lo esperado, hayan disparado la cotización del dólar. Sin embargo, los expertos recomiendan no perder de vista al oro y la plata, y recomiendan aprovechar los bajos precios para tomar posiciones, especialmente por medio de bullion o monedas de inversión.
Como informa Stefan Gleason desde Money Metals, el precio de la plata ha registrado un nuevo mínimo anual la semana pasada, mientras que el oro se mantiene en la misma horquilla de precios en la que ha estado cotizando en lo que llevamos de año.
La ratio oro/plata (que mide el número de onzas de plata que se necesitan para adquirir una de oro) se ha elevado desde un mínimo inferior a 64 en febrero, a 77 el pasado 16 de septiembre. Esto quiere decir que, ahora mismo, la plata resulta muy barata en comparación con el oro.
Según Gleason, la cuestión que ahora se debate es si estas caídas del precio de oro y plata suponen un cambio en los fundamentos a largo plazo de estos metales, y se ha pasado de un mercado alcista a uno bajista.
Desde Money Metals señalan que esta cuestión dependerá de si el suministro físico crece con mayor rapidez que la demanda.
La plata, un metal estratégico
En el caso de la plata, desde uno de los mayores productores mundiales de este metal, la minera canadiense First Majestic Silver, creen que la producción de este metal va a comenzar a declinar, mientras que la demanda del mismo crecerá.
Según manifestó su CEO, Keith Neumeyer, ante el Denver Gold Group, la producción mundial de plata lleva en declive desde 2016, mientras el consumo crece por encima de los 1.000 millones de onzas anuales (31.100 Tm).
“Así que, por cada onza de oro que se extrae en el mundo, solo estamos produciendo siete onzas de plata, lo que es un dato sorprendente, considerando que la ratio oro/plata está alrededor de 70 a 1. Si alguien me lo explica, se lo agradeceré”, señala Neumeyer.
El ejecutivo subraya que la plata es un metal estratégico: los vehículos eléctricos consumen un poco menos de 100 millones de onzas (3.110 Tm). En la actualidad hay 1.400 millones de vehículos con motor de combustión interna, y el año pasado se fabricaron 90 millones de vehículos. De ellos, cinco millones eran eléctricos.
La actual tendencia de los gobiernos de muchos países hacia la eliminación de los vehículos de combustión interna para el año 2030 o 2040 implica que habrá que fabricar vehículos eléctricos a un ritmo mucho mayor que el actual. Y ello supondrá que en las próximas décadas el consumo de plata por parte de esta industria va a superar los 100 millones de onzas anuales.
Si se añade la demanda que va a experimentar el sector de la energía solar fotovoltaica, que también consume alrededor de 100 millones de onzas anuales y que se espera que crezca durante los próximos años, el resultado es que hay dos sectores industriales que ya consumen alrededor del 20% de la producción global anual de plata.
El mercado de inversión
Como señala Gleason, otro factor importante de la demanda tanto de oro como de plata va a ser el mercado de inversión en lingotes y monedas, que puede influir en la dinámica del suministro y la demanda.
“La compra de bullion se disparó durante el año pasado debido a la pandemia, lo que elevó las primas e hizo crecer el precio spot de los metales. Desde entonces, esta demanda se ha enfriado, pero podría resurgir en cualquier momento, sobre todo si se registra algún otro acontecimiento que alarme a los inversores y les obligue a buscar un activo refugio”, apunta Stefan Gleason.
Ante estas amenazas a la estabilidad de los patrimonios de los inversores, desde Money Metals aconsejan posicionarse en metales preciosos físicos, al margen del sistema bancario. Y el actual contexto de precios bajos de oro y plata constituye un momento idóneo.
No es extraño que la Perth Mint, Casa de la Moneda de Australia Occidental, haya cerrado un año fiscal 2020-2021 con cifras récord y transacciones por valor de más de 26.000 millones de dólares. Sus bullion Canguro de oro y plata, así como la nueva serie dedicada al Año del Tigre son una interesante oportunidad para los inversores, ya que están disponibles a un precio comparativamente mejor que el de otros bullion.
Por su parte, la United States Mint está registrando una demanda muy importante de los nuevos diseños de sus American Eagles de oro y plata, el primer cambio que se hace en estos bullion desde que salieron al mercado en 1986.
“Independientemente de este cambio de diseño, lo importante, desde el punto de vista de los inversores, es el interior. En un mercado alcista de los metales preciosos, los factores que más influyen en los rendimientos que obtienen los inversores son la cantidad de onzas que se poseen y el precio que se pagó por ellas. Así que, cuando existe la oportunidad de comprar barato, hay que aprovecharla al máximo y comprar bullion con una prima baja sobre el precio del metal, ofrecidos por comerciantes reconocidos”, concluye Gleason.