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Nuevo “zarpazo” a la hucha de las pensiones que en 2018 quedará completamente vacía

Así titulaba el pasado jueves 1 de diciembre, el Newsletter “La Moncloa”, editado por el Ministerio de la Presidencia de Gobierno, la información sobre el nuevo “zarpazo” a la hucha de las pensiones aprobado la pasada semana: “La Seguridad Social dispone de 9.500 millones de euros del Fondo de Reserva para abonar las pensiones”. Mientras tanto, la mayoría de los medios de comunicación nacionales titulan: “El Gobierno saca…”; “La hucha de las pensiones pierde…”, “Hucha de las pensiones bajo mínimos…”

Una fórmula, la del Gobierno, de maquillar una nueva sangría, la tercera de 2016, a los Fondos de las Pensiones de todos los españoles que, desde el año 2012, ha sufrido ya la hemorragia de un total de algo más de 66.000 millones de euros, más de 19.000 millones en lo que va de año. Desde 2012 no se había sacado tanto dinero, de una sola vez.

 

Según la información del Ministerio de la Presidencia “Esta cifra ha sido financiada en su mayor parte gracias a los rendimientos de las inversiones del propio Fondo, que han supuesto unos elevados rendimientos: en concreto, 28.719 millones de euros de los que 2.623 millones corresponden a 2016”.

La medida ha sido tomada por la Tesorería de la Seguridad Social para afrontar tanto la paga ordinaria como la extraordinaria que reciben los pensionistas en diciembre.

Tras esta disposición, que es la más elevada realizada de una vez desde 2012, el Fondo de Reserva se ha reducido a 15.915 millones de euros. A este ritmo, si se abonan las próximas dos pagas extraordinarias, las de julio y diciembre de 2017 a principios de 2018 ya no quedará ni un céntimo más en el Fondo de Pensiones, ya que el actual nivel de cotizaciones no es suficiente ni para afrontar el pago mensual que reciben los jubilados, pensionistas por enfermedad, viudas, etc.

El Fondo de Reserva de la Seguridad Social fue creado en el año 2000 durante la VII legislatura, bajo la presidencia de José María Aznar, por recomendación del Pacto de Toledo, el espacio donde Gobierno, patronal y sindicatos discuten la situación de las pensiones. En su mejor momento, el Fondo llegó a disponer de más de 66.800 millones, pero la crisis y el envejecimiento de la población han hecho que ahora mismo, con la última “derrama”, apenas se esté por encima de los 15.000 millones de euros.

Con salarios bajos, escasa productividad, una población envejecida y baja natalidad, entre otros factores, será necesario poner en marcha nuevas medidas a corto y largo plazo para afrontar y mantener los pagos de las prestaciones.

No cabe duda que, al margen de seguir cotizando a la Seguridad Social, los españoles con nómina o los autónomos han de decidirse ya por medidas alternativas. Medidas que pasan por calibrar la necesidad de acudir a proyectos para planificar su futuro con activos, fuera de los ámbitos gubernamentales, que puedan garantizar su futuro y protejan el poder adquisitivo de su dinero.

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